El gobierno federal iniciará ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) “un proceso de solución de controversias” por los aranceles que el gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, determinó imponer desde el pasado primero de junio al acero y aluminio que importa desde México, anunció la Secretaría de Economía (SE).
“México considera que las medidas impuestas por Estados Unidos al amparo de la Sección 232 de su legislación, argumentando amenazas a su seguridad nacional, violan el Acuerdo sobre Salvaguardias de la OMC al no haberse adoptado conforme a los procedimientos ahí previstos, además de que violan el Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio de 1994 (GATT 1994)”, explicó.
Sostuvo que el gobierno de México refrenda que sus acciones continuarán apegándose al estado de derecho comercial internacional y serán proporcionales al daño que México lamentablemente reciba.
La SE aún no publica en el diario oficial de la federación (DOF) el listado de las fracciones arancelarias o productos que se importan desde Estados Unidos a los que México, a su vez, determinó imponer aranceles como represalia comercial por la decisión de su principal socio comercial.
Desde el jueves pasado, cuando Estados Unidos anunció los aranceles al acero y aluminio que importa desde México pero también desde Canadá y la Unión Europea, la dependencia informó que se impondrán “medidas equivalentes a diversos productos como aceros planos (lamina caliente y fría, incluidos recubiertos y tubos diversos), lámparas, piernas y paletas de puerco, embutidos y preparaciones alimenticias, manzanas, uvas, arándanos, diversos quesos, entre otros, hasta por un monto equiparable al nivel de la afectación”.
Sin embargo, no se precisó la fecha en que entrarán en vigor y las cámaras industriales siguen a la espera del detalle de los productos a los que se les aplicarán.
