El ministro de Relaciones Exteriores británico Boris Johnson presentó su dimisión, anunció este lunes Downing Street, en plena guerra en el gobierno por el rumbo del Brexit.
«Esta tarde, la primera ministra aceptó la renuncia de Boris Johnson como ministro de Exteriores. Su sustituto se anunciará en breve», dijo la oficina de Theresa May en un comunicado.
Johnson no ha dado explicaciones sobre su decisión.
La dimisión de Johnson se suma a la del ministro para el Brexit, David Davis, después de que May convocara a una «cumbre» de su gobierno, el viernes, en la que les comunicó su decisión de mantener estrechos lazos económicos con la UE y ordenó a sus ministros que cerrasen filas.
Los euroescépticos más duros como Johnson y Davis pretendían en cambio cortar por lo sano con los socios europeos, y sobre todo en sus regulaciones y con la justicia europea, y dedicarse a tejer acuerdos de libre comercio con países como Estados Unidos o Australia.
Davis negó que quisiera encabezar una rebelión interna contra May, pero la dimisión de Johnson acerca esa posibilidad por la debilidad parlamentaria de la primera ministra, que tiene que apoyarse en los unionistas norirlandeses para gobernar.