«La imagen de AMLO arrastrando con una mano una maleta de viaje con un portafolio encaramado en precaria columna mientras sostiene con cierta dificultad un teléfono celular en oido, arrasó en redes sociales. En un país en el que la figura presidencial es aún percibida con ánimos monárquicos, resulta inusitado ver a un presidente electo cargar su propio equipaje y sin el impensable séquito de ayudantes y cortesanos». Es parte de lo que escribe Jorge Zepeda Patterson en «El País».. Estuvo buena, ya pasó, pero como hoy dijeron con Loret de Mola, «AMLO ya dejó de ser un ciudadano privado, para ser un hombre de Estado. Debe tener seguridad». Foto de «síntesis.mx»