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EuropaPress / SINEMBARGO.MX

El cantante mexicano Alejandro Fernández entró en furia en pleno concierto y gritó, con palabras poco apropiadas, a aquellas personas que rumorean sobre sus supuestos vicios.

En mitad de un concierto en Guadalajara, México, el “Potrillo” estalló al sentirse ofendido por ser un blanco de críticas tras una extraña actuación en la que, según multitud de usuarios, se encontraba bajo lo efectos de alguna sustancia.

“Nunca en mi puta vida una niña, una de mis hijas, me habló para ver si estaba bien, porque había visto un puto vídeo”, dijo el mexicano refieriéndose al viral contenido en el que aparece tocándose la nariz en numerosas ocasiones.

“Entiendan, carajo, hacen daño, hacen daño al mandar todas esas chingaderas, ¡no mamen!”, gritó el cantante.

Tras estas virales declaraciones escribió en su cuenta de Instagram que no tenía que aclarar nada sobre sus palabras. “Solo decirles que soy un hombre de ley tal cual me enseñó mi padre, claro como el agua”.

“Gracias mi Guadalajara, mi aire, mi vida, mis amigos, mi familia, ustedes mi público son los que me hacen más fuerte cada que lo necesito. Lo que dije la noche de ayer me salió del alma, del corazón, gracias por su apoyo”.

Lejos de ofenderse, el público lo apoyó entre gritos y aplausos, aunque no faltó quien se molestó por el lenguaje de la estrella mexicana.