El pasado jueves Ricardo Monreal, el coordinador de Morena en la Cámara de Senadores, presentó una iniciativa de ley para prohibir el cobro de algunas comisiones que ahora los bancos hacen a sus clientes. La iniciativa tomó por sorpresa al sector bancario e hizo que la Bolsa de valores perdiera 6 por ciento. La mayor caída en 10 años.

Con horas de retraso, el futuro secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, por instrucciones del presidente electo, leyó un comunicado, para calmar a los mercados, donde aseguraba que la iniciativa no caminaría. En Morena se sabía que la salida de Urzúa era por orden de López Obrador, pero Monreal insistió en su posición.

El viernes, el candidato electo se vio obligado a decir que su gobierno y su partido “no vamos a hacer ninguna modificación legal que tiene que ver con lo económico, financiero y fiscal en los próximos tres años”. Y que eso era compromiso de campaña y días atrás se lo había confirmado a la presidenta del Banco Santander, Ana Botín. A pregunta expresa de un periodista dijo no respaldar la iniciativa de Monreal.

Ese mismo día, la presidenta de Morena, Yeidckol Polevnsky, se enfrenta a Monreal y declara que “el presidente electo jamás vio esa iniciativa, no puede ser que temas tan importantes no se consulten. Es inaceptable”, y añadió que “Morena no está de acuerdo, Morena como partido no fue consultado”.

Para que no quedara duda afirmó: “Nosotros somos un partido diferente, creemos en la consulta, creemos que debemos involucrar a los interesados y lo hemos hecho, lo ha hecho Andrés Manuel López Obrador toda la vida. Es un posicionamiento de nuestro movimiento, no podemos sacar bomberazos y meter la pata”.

Nadie duda de que Polevnsky salió a descalificar al senador Monreal por su “bomberazo” y “metida de pata”, a petición de López Obrador. El sábado el senador insistió: “Pese a los puntos de vista de políticos, y grupos económicos y financieros, sigo sosteniendo que son un abuso cercano a la usura las comisiones bancarias y los intereses que se cobran a los usuarios en México”. El coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Mario Delgado, también se deslindó de Monreal.

Hay evidencias suficientes, lo confirman voces de Morena, de que el senador Monreal tomó la decisión de enviar la iniciativa por cuenta propia y sin avisar a López Obrador. Y que lo hizo en una demostración de fuerzas en la disputa que ya se ha instalado al interior de Morena, entre distintos liderazgos, para posicionarse en las cámaras, en el partido, con sus militantes y también en la opinión pública.

A pesar de las reacciones y los compromisos de López Obrador, Polevnsky, Delgado y Urzúa, el domingo pasado, en un comunicado, todos los morenistas en el Senado respaldaron la iniciativa de Monreal. ¿Monreal doblegó a López Obrador? ¿Ellos llegaron a un acuerdo? ¿López Obrador se contradice y paga los costos? En el sector financiero hay muchas dudas, inquietudes y preguntas. Hay también desconfianza en el nuevo gobierno.

Dirigentes de Morena, en privado, hablan de que ya existen tres grupos, hay un cuarto en formación, que se empiezan a mover, para fortalecerse y ganar posiciones: el grupo de López Obrador, el de Marcelo Ebrard, el de Ricardo Monreal y el que empieza a constituir Gerardo Esquivel, futuro subsecretario de Hacienda. No es claro lo que va a pasar, pero sí que, a dos semanas de que López Obrador asuma la presidencia, ya hay grupos al interior de Morena disputando el poder.

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