El próximo Jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, era un empresario que no comulgaba con las ideas de López Obrador, sobre todo a partir de que en 2006 realizó un bloqueo en las calles de Reforma de la CDMX. Dante Delgado lo acercó a AMLO y éste lo comvenció de que trabajara en su proyecto. Pero el está a favor de una buena relación con los empresarios para lograr un mejor desarrollo del país, sin privilegios indebidos. Por ello, ayer declaró que la iniciativa relacionada con las comisiones bancarias fue un «tropezón» que provocó desconfianza entre los inversionistas y mercados. Según «Reforma», Romo tuvo un encuentro con la comunidad judía donde también dijo que el gobierno se había equivocado en el proceso para la eliminación de la construcción del aeropuerto de Texcoco.. A lo mejor le «cortan» la cabeza, pero que sigan actuando así, porque de esa manera ayuda a AMLO. Foto de «XEU».