Buen día apreciado lector:

Como ha sucedido en cada inicio de una nueva administración estatal, empezó a trascender el despido de empleados en diversas dependencias y entidades gubernamentales.

En algunos casos tal vez sea normal porque el reciente gobierno anterior trajo muchos “boqueños” que debieran estar conscientes de que sólo era un contrato de dos años, pero suena muy injusto el caso de los 31 trabajadores con antigüedad despedidos del otrora bien afamado y visitadísimo Museo Interactivo de Xalapa.

A diferencia de quienes del gobierno anterior quedan aún como herencias, que saben perfectamente que se tienen que ir, que aunque les queda tiempo legal en funciones, saben que no encajan en el nuevo grupo; que incluso por dignidad y vergüenza deben hacerlo, y en atención a la buena disposición de la que tanto predica el Presidente Andrés Manuel López Obrador, el joven gobernador Cuitláhuac García Jiménez haría muy bien en ordenar la revisión de este asunto y proteger a los trabajadores y sus familias.

Pero decía también que se escuchan cosas buenas del nuevo gobierno estatal como la flamante adquisición de parte del Jefe del Ejecutivo, de la muy apreciada señora María del Consuelo Thomas, quien a pesar de haber militado en partido diferente, fue nombrada Coordinadora de Documentación y Control de Gestión del Gobernador.

Esta designación seguramente es bienvenida porque doña Consuelo ya empezó a actuar con sensibilidad, haciendo llamadas a los interesados, a nombre del mandatario, para encontrar soluciones a problemas planteados.

También indudablemente abrirá puertas y alentará a quienes con talento y positiva trayectoria dejaron otras trincheras para abanderar al morenismo, como Fernando Arteaga Aponte, Rosa María Hernández Espejo o Citlalli Navarro que contra viento y marea desafiaron al bastión panista del ex gobernador Miguel Angel Yunes en la zona conurbada Veracruz-Boca y le allegaron una buena cantidad de votos al joven Cui.

En fin lo del trabajo siempre debe ser visto con responsabilidad, con seriedad; es terrible perderlo cuando se está acostumbrado a un salario y más en temporada navideña; sufre el despedido y sufre toda su familia. Como dice el hermano Pedro Cadena Mathey que labora en la SEV:

“La vida me dio un regalo/ cuando empecé a razonar/ mi padre fue el indicado/ porque me supo iniciar. Qué bonito es aprender/ a valorar el trabajo/ a amarlo, cual debe ser/ sin poner trabas, ¡carajo!; te entregas completo a él/ y todo debes cuidar/ porque puedes encontrar/ problemas, por el deber/ Si tú amas tu trabajo/ se te va a facilitar/ lo harás contento, de tajo/ no te podrán reclamar”. Lo malo que te lo quiten injustamente.

Tenga el lector un fin de semana de paz y armonía en su entorno

gustavocadenamathey@nullhotmail.com