«Nos dicen que ante los reclamos y abucheos que han recibido gobernadores de oposición en las visitas de Andrés Manuel López Obrador a los estados, algunos de ellos han optado por llevar sus porras para contrarrestar las rechiflas de los morenistas y evitar malas pasadas. Por ejemplo, el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, tuvo una nutrida porra que incluso portó camisetas con la leyenda «Yo con Silvano», con gritos a todo pulmón a favor del michoacano. Lo mismo se vio la semana pasada en Guerrero con el gobernador Héctor Astudillo. Ahora sí que llegó el momento de sacar las matracas contra los malos tratos de los seguidores del Jefe del Ejecutivo». Lo comentan en «Bajo Reserva» de El Universal».