Es una de las máximas experiencias culinarias. Se trata de un vinagre de origen italiano al que se conoce como vinagre balsámico. Se produce en la región de Emilia-Romaña situada al norte de la península itálica, de donde también procede un platillo conocido mundialmente: el espagueti a la boloñesa o bolognesa. El vinagre balsámico se hace con el mosto del vino, que es el jugo de la uva que aun contiene la cascarilla y las semillas como parte del proceso para elaborar la bebida como tal. Como se sabe, los diferentes tipos de vinagres han sido usados desde la antigüedad para preservar de la descomposición a los alimentos y en especial el balsámico que ha acompañado al hombre desde épocas medievales. Lo probè y encontrè hace como 30 años medio olvidado en un estante de la tienda del pelícano. Su sabor a antiguo me remitió de inmediato a épocas medievales y me situé en los ambientes que describen Víctor Hugo en ‘Los miserables’ y Patrick Süskind en ‘El perfume’, un aroma impuro pero delicioso. Comerlo mezclado con aceite de oliva en las ensaladas, acompañando como aliño del filete de res a la mantequilla o como remojo de una baguete horneada untada con ajo son una revelación. Si no lo ha probado decídase a hacerlo de una vez y le garantizo que el sabor de la Edad Media le entrarà por el paladar.. Lo escribe Marco Aurelio Gonzàlez Gama, directivo de este Portal.