«Hay tres formas de lidiar con un bully: una, dejarse; dos, enfrentarlo, y tres, ignorarlo. El Presidente Andrés Manuel López Obrador ha decidido esta tercera opción en su relación con Donald Trump. Por ahora le ha funcionado. LA estrategia de dejarlo dando vueltas, solito, en el viento le está dando el espacio, el tiempo y sobre todo los resultados que quiere López Obrador. Este, es más listo que Trump. Pero esta estrategia tiene demasiados huecos para sostenerse por largos tiempos en una relación tan compleja como la de México y Estados Unidos». lo comenta Jorge Ramos en «Reforma».