«Don Agustín Acosta Lagunes y su esposa vivieron un corto tiempo en el Hotel Xalapa, donde su servidor laboraba como Jefe de Divisiòn Cuartos. El dìa que se retirò le preguntè a què lugar se enviaban los regalos acumulados. Me dijo «forma una fila de empleados y ahorita queda libre la habitaciòn». Guayaberas, botines, sombreros, cuadros se les entregaron, y se despidiò de mano de cada uno de los empleados. Como gobernante mis respetos. En mi personal opiniòn, el mejor». Lo escribió Porfirio Jimènez Hernàndez en el Facebook. Imagen de Telever.