Los comensales de céntricos cafés de la ciudad fueron sorprendidos por los gritos y actitudes extrañas de la mujer que insistentemente decía que no la dejaban pasar a los cafés y que todo el mundo la miraba de forma extraña.
Desde las nueve de la mañana y hasta las 10:30 horas, la mujer transitó de esa forma por el primer cuadro de la ciudad.
También se metió a la Catedral de Xalapa para seguir escandalizando.
En el templo católico, la mujer se desnudó quedando solamente en ropa interior, lo que ocasionó la sorpresa de los fieles que en ese momento se encontraban, así como de los representantes de medios de comunicación que la seguían.
Para esa hora, la mujer se había cambiado de blusa y portaba ya una de la Cruz Roja Mexicana.
Después de hacer su escándalo, bajó por las escalinatas de catedral y se subió a un automóvil con el cual posteriormente bloqueó la calle Juan de la Luz Enriquez esquina con la avenida Revolución, en donde reitero ser trabajadora de la Cruz Roja.
La mujer, comenzó a hablar una serie de incoherencias y pidió exclusividad a un medio de comunicación, para posteriormente sacar de su automóvil una escoba, un florero y otros objetos que posteriormente arrojó a la vía pública.
Personal derechos humanos y del instituto de la mujer municipal arribaron al lugar para atenderla, en todo momento se mantuvieron a su lado cuidando su integridad.
Minutos después y luego de ser retirado su vehículo por una grúa, la mujer se negó a bajarse y se mantuvo en la unidad, la cual más tarde abandonó y siguió su caminar en la calle Enríquez, en donde irrumpió en una sucursal bancaria y otros cafés del centro continuando con su escándalo.
Al lugar arribaron médicos especializados en Salud Mental y personal de la Cruz Roja Mexicana quienes negaron que esta mujer pertenezca a su institución.
La mujer fue trasladada por los paramédicos a un hospital, donde se espera que valoren su estado de salud mental.
