Sí: Keaton, Kilmer, Clooney, Bale, Affleck… pero para la cultura pop Batman siempre tendrá el rostro del tercer actor que le interpretó, Adam West, el primero que dio vida al gran vengador en la televisión. West, ese Batman tan querido, falleció el viernes en Los Ángeles a los 88 años a causa de una leucemia, ha informado su familia. Entre 1966, en concreto el 12 de enero, y 1968, West (Seattle, 1928) interpretó al hombre murciélago y el personaje marcó para bien y para mal toda su carrera.
Su familia ha recordado en un comunicado publicado tras su muerte que siempre se identificó con el personaje. «Aspiró a tener un impacto positivo en las vidas de sus fans. Fue y siempre será nuestro héroe», ha dicho.
La sombra de Batman dificultó que West lograra el reconocimiento del público con otros personajes, a pesar de que trabajara en más de sesenta películas y ochenta series de televisión. Estudiante de Literatura y Psicología, dj de radio, amante de los cómics, la vida de William West Anderson, su nombre real, dio muchas vueltas hasta encarnar a Bruce Wayne y su alter ego heroico en la pequeña pantalla. Durante dos años, enrolado en el ejército, trabajó en diversas emisoras militares de televisión, y posteriormente, junto a su primera esposa (tuvo tres y con la tercera, que le sobrevive, llevaba casado desde 1970), viajó por Europa hasta que se le acabó el dinero. Con su segunda esposa, a la que conoció haciendo un programa infantil en Hawái, y sus dos hijos, llegó a Hollywood en 1960, y su carrera se llenó de decenas de personajes en alguna película como Gerónimo o series como Perry Mason, Los detectives, Bonanza, Embrujada, El virginiano… Los clásicos de los años sesenta, hasta que él mismo se convirtió en un clásico en 1966 cuando arrancaron las tres temporadas de la serie Batman. Gracias a un anuncio que hizo para el cacao instantáneo Quik, de Nestlé, los jefazos de la ABC se fijaron en él. También encarnó al superhéroe en una película en 1966 y en la miniserie Legends of superheroes.
El éxito de su Batman se debe a cómo sus creadores exprimieron la cultura pop, mostrando en pantalla onomatopeyas dibujadas como en los tebeos cuando había peleas, a los trajes coloridos, al ambiente kitsch con cierta sorna (muy alejado al tenebrismo que rodea a este personaje desde los años ochenta) y a actores de clase que dieron vida a otros personajes, entre ellos Burt Ward como Robin, Cesar Romero como Joker, Burgess Meredith como Pingüino o Julie Newmar, que encarnó a Catwoman en solo 13 entregas, pero dejando una enorme huella. La serie se canceló tras 120 episodios por culpa de los altísimos costes de producción.
Farewell Adam West. You were MY Batman. Such a super funny, cool, charismatic actor. Loved the show as a kid, still love the show now. POW! pic.twitter.com/6QAZnOhtMs
— edgarwright (@edgarwright) 10 de junio de 2017
El resto de su carrera nunca llegó al nivel de este exitazo, y decayó entre series de televisión y su doblaje de dibujos animados. Su renacer llegó en ese campo, como el alcalde loco Adam West (sí, le pusieron su nombre) en la serie Padre de familia y con su aparición en The Big Bang Theory, en la que el actor se interpretó a sí mismo en febrero de 2016. La serie celebraba así su episodio número 200 y el 50 aniversario de Batman: «Es muy divertido descubrir que uno sigue en forma y ver qué hay en la cabeza de la gente más joven».
En 1994 había publicado su autobiografía, Back to the Batcave, con muestra de cierto dolor por no haber encarnado a Batman en el cine. Una de sus posesiones más preciadas era un dibujo original de Batman de Bob Kane con la inscripción: «To my buddy, Adam, who breathed life into my pen and ink creation». Toda una muestra de cariño y de respeto que West también recibió en los últimos años de miles de fans agradecidos.