Lugar:
Fuente:
La Jornada / Alejandro Alegría

La aprobación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en el Senado de la República, así como el cumplimiento de los compromisos del acuerdo migratorio reciente firmado facilitará el camino para el pacto sea ratificado por los legisladores de la Unión Americana y se reduzcan las presiones de Washington para imponer aranceles graduales a productos mexicanos, indicó la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur).

El presidente de esa organización empresarial, José Manuel López Campos, expresó que con la puesta en operación del pacto comercial que sustituirá al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), se fijarán las bases para que los temas económicos no se mezclen con asuntos sociales entre México y Estados Unidos.

Consideró que la ratificación del T-MEC se puede concretar en 45 días después del 7 de junio, que es la fecha que fijaron los gobiernos de México y Estados Unidos para analizar los resultados de las acciones que ya se aplican para frenar el flujo de migración y llegado el tiempo, se evaluará nuevamente la posibilidad o no, de que se fijen aranceles a los productos mexicanos que ingresan la nación vecina del norte.

El líder empresarial recordó que la Cámara de Representantes de Estados Unidos entra en receso el 26 de julio, pero el sector privado espera que se apruebe el T-MEC antes de esa fecha, pues posteriormente debe enviarse al Senado estadunidense para concluir el proceso.

“La ratificación de la Cámara de Senadores envía una señal positiva a Estados Unidos y Canadá de que es necesario fortalecer el área económica de Norteamérica, como la más competitiva a nivel mundial, que alberga 28 por ciento del Producto Interno Bruto del orbe y 16 por ciento del comercio mundial, de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y la Organización Mundial de Comercio”, aseguró.

El dirigente de la Concanaco Servytur afirmó que con el acuerdo comercial, Norteamérica aumentará el interés para la inversión extranjera directa por instalar plantas en el país y que puedan alcanzarse porcentajes de producción de origen fijados en el T-MEC.

López Campos expuso que con esta medida se evitará la informalidad en el comercio electrónico, y malas prácticas fiscales y normativas, que hace 25 años no estuvieron reguladas en el TLCAN.

“Con el T-MEC, en el sector terciario de la economía, la actividad comercial será la beneficiada en primera instancia, en importe económico, seguido por el segmento de servicios, que tendrá el mayor repunte en porcentaje, mientras que en el turismo el impacto positivo se dará en la proveeduría que será más competitiva”, aseveró.