En Puebla, el morenista Miguel Barbosa quiere, sin diálogo de por medio, quitarle el control policíaco a los alcaldes. El flamante gobernador anunció que firmaría con ellos un «convenio», en el cual no tienen nada que convenir pues lo tienen que aceptar sí o sí. Por lo pronto su plan es comprar mil patrullas que sin duda harán feliz a un contratista. Lo publican en «Templo Mayor» de Reforma.