La Comisión Nacional del Agua (Conagua) determinó que los primeros siete meses del 2019 fue el periodo más seco de los últimos 38 años, superando a 1998, lo que favoreció una gran cantidad de incendios.
Igualmente, el mes de julio concluyó con temperaturas medias dentro o por arriba del promedio y déficit de precipitación entre un 50 a 75 por ciento en gran parte del estado.
La actualización del pronóstico de largo plazo estableció un escenario de la continuidad de lluvias por abajo del promedio en agosto, en septiembre las precipitaciones estarían por arriba en la zona norte y dentro o por abajo en las zonas centro-sur; en este periodo la temperatura media sigue previéndose por arriba de lo histórico, informó Federico Acevedo Tosas, subcoordinador de Pronóstico Estacional y Meteorológico de la Secretaría de Protección Civil.