«En los últimos dos días, el presidente López Obrador parece ser otro. Como si hubiera escuchado la crítica. Y soltó tres frases que rompen con su discurso habitual: sorprendió con que no tiene otros datos sobre la economía del país, prometió que no va a andar denostando gente sin pruebas y anunció que ya no va a seguir echando la culpa de todo a los gobiernos del pasado. Ojalá que sea una nueva tónica presidencial. pero para serles franco. no creo que dure mucho. Pero esa es mi expectativa». Lo comentó Loret de Mola en «El Universal» de Ealy Ortiz.