RICOS Y PODEROSOS

Blindaje financiero de la 4T

Marco A. Mares

El gobierno de la 4T sigue sin desviaciones las premisas fundamentales de un manejo económico ortodoxo.

Le ha apostado a la estabilidad macroeconómica, a mantener las finanzas públicas sanas, a no aumentar la deuda, a respetar la autonomía del Banco de México, y abatir la inflación y al libre comercio internacional.

El manejo económico en lo macro se ha mantenido prácticamente sin cambios respecto del manejo que tuvieron los gobiernos previos, considerados como “neoliberales”.

El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, ha rechazado en los últimos días etiquetar al Paquete Económico para el 2020 como neoliberal o populista. Pero sí lo ha considerado como pragmático.

Neoliberal o pragmático, lo cierto es que la percepción general es que no ha habido cambios radicales en el plano macroeconómico.

El gobierno lópezobradorista se ha aplicado en el refinanciamiento de su deuda externa, que mayoritariamente está en pesos y largo plazo.

Adicionalmente está haciendo lo necesario para mantener un sólido blindaje financiero sobre la economía.

En particular, está tomando medidas para procurar reducir el nivel de riesgo que han marcado las calificadoras de deuda sobre la principal empresa estatal: Petróleos Mexicanos (Pemex), que pone en riesgo la calificación sobre la nota soberana.

Inyección, ¿insuficiente?
Aunque la inyección de 5 millones de dólares que anunció ayer la Secretaría de Hacienda, que encabeza Arturo Herrera, fue recibida con cierta frialdad y escepticismo por las agencias calificadores.

No es para menos. Pemex es la empresa petrolera más endeudada del mundo con un monto superior a 100,000 millones de dólares.

Todavía más. El Plan de Negocios de Pemex no convenció y los proyectos del gobierno de la 4T preocupan por su inviabilidad y elevado costo.

Además de que la falta de claridad en la política energética, al ser interrumpidas las rondas de licitaciones de bloques para la exploración y explotación en aguas profundas por parte de los inversionistas internacionales, ha generado una incertidumbre notable.

No obstante, la inyección por 5,000 millones de dólares, aunque insuficiente, era necesaria y fue aplicada correctamente, por lo menos para atemperar en el corto plazo, la situación financiera de la petrolera.

Cuatro pilares
En el Paquete Económico presentado por el Ejecutivo federal, se consigna la intención del gobierno federal de preservar la salud de las finanzas públicas.

Y finca en cuatro pilares esa intención: 1.- El programa de coberturas petroleras, que están siendo renovadas en los mercados financieros internacionales y en breve se anunciará su complementación. 2.- La acumulación de recursos en los fondos de estabilización. 3.- Mantener la Línea de Crédito Flexible (LCF) con el FMI y 4.- Un mejoramiento en el perfil de deuda.

FMI, crédito flexible
México renovará, muy seguramente para el próximo último día de octubre, la Línea de Crédito Flexible con el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero lo hará por un menor monto.

La renovación será por alrededor de 60,000 millones de dólares, en lugar de los 74,000 millones de dólares que hasta la fecha están en vigor y que fueron pactados en noviembre del 2018.

No será la primera vez que México reduzca el monto de la Línea de Crédito Flexible del FMI.

En noviembre del 2017, el monto fue por 88,000 millones de dólares y se redujo a 74,000 millones de dólares para el siguiente año.

Hay que recordar que ésta Línea de Crédito Flexible sólo ha sido extendida a tres países: México, Colombia y Polonia. Y ninguno de los tres la ha utilizado.

México comenzó a recibir éste respaldo financiero del FMI, desde el año 2009, y es considerada como un blindaje adicional para su economía, frente a la volatilidad global.

La LCF es un instrumento que provee seguridad financiera a países que han demostrado tener fuertes fundamentales y políticas como es el caso de México

Para México es una ventaja contar con éste respaldo financiero, pero para el FMI representa “el congelamiento” de esos recursos que podría destinar a otros propósitos. En cambio, el organismo financiero internacional los mantiene disponibles, por si los necesita México

La Línea de Crédito Flexible fue creada para atender la demanda de préstamos de prevención y mitigación de crisis proveniente de países con marcos de política e historiales económicos muy sólidos.

Hasta la fecha, tres países: Polonia, México y Colombia, han tenido disponible este crédito.

Ninguno de ellos ha efectuado un giro sobre la LCF que ofrece a los países como un valioso mecanismo de apoyo y ayuda a reforzar la confianza del mercado en periodos de intensificación de los riesgos.

Que el gobierno de la 4T renueve esta Línea de Crédito Flexible, sin duda es importante

ATISBOS
APOYO MODERADO.- Para la agencia calificadora Fitch, el apoyo del gobierno a Pemex es “moderado”, considerando la pesada carga fiscal de la empresa.

Destacó que la deuda ha limitado la capacidad de reinversión de Pemex y señaló que el apoyo total del gobierno mexicano hacia Pemex en el 2019 puede totalizar aproximadamente 9,500 millones de dólares después de la inyección de capital, siempre que la compañía pueda obtener 100% de los beneficios fiscales que el gobierno mexicano extendió a la empresa este año.

Moody’s advirtió que a pesar de que la operación debería aportar un alivio financiero a Pemex, no cambia de manera sustancial las perspectivas crediticias del soberano, las cuales se ven reflejadas en la perspectiva Negativa a la calificación de “A3”.

Tomado de El Economista.