Mensajes de texto que Joaquín El Chapo Guzmán escribió a su esposa y socios, una carta amorosa de su puño y letra dirigida a Emma Coronel, audios de las órdenes que daba a los miembros del Cártel de Sinaloa, muestran de cuerpo entero al narcotraficante, quien por un lado podía mandar asesinar a alguien que no le dio la mano durante una reunión; y por otro, ser amoroso con sus hijos y pareja.
Lo anterior es parte de lo que se revela en el documental El Chapo: dos rostros de un capo, de CNN en Español; producción que se basa en las investigaciones que durante 30 años realizaron el FBI, la DEA y la Oficina de Inteligencia y Seguridad de Estados Unidos. Casi 300 mil documentos y más de mil 500 audios de llamadas intervenidas recabados y que la Fiscalía dio a conocer durante el juicio que enfrentó el narcotraficante en Nueva York, tras el cual fue sentenciado a cadena perpetua, el pasado 17 de julio.
“Este documental nos ofrece esa perspectiva, tanto de su carrera criminal y de su vida personal, ofrecemos estas múltiples facetas que conformaron la figura de El Chapo Guzmán, su vida personal, este gran poder de seducción que tenía; y también, a la par, cómo manejaba su negocio, como construyó este imperio de la droga, que fue el caso principal por el cual fue enjuiciado en Estados Unidos”, explicó a La Razón Guillermo Blanco, productor del documental que se transmite mañana, a las 19:00 horas, por
el canal de CNN en Español.
La revisión de esta documentación, detalló, les permitió ir esbozando una imagen distinta a la que se ha creado en torno a quien fuera líder del Cártel de Sinaloa. “Pensábamos que conocíamos todo de El Chapo Guzmán y lo cierto es que estos elementos dan una perspectiva interesante de cómo opera un cártel de la droga desde su interior; cómo Joaquín Guzmán Loera negociaba grandes cargamentos de droga, cómo mandaba a matar gente; es información clasificada, a la que muy pocas personas tienen acceso, eso es lo que hace distinto este documental”, destacó Blanco.
El objetivo de este trabajo, aseguró Fernando del Rincón, conductor del documental, fue reconstruir las casi tres décadas en las que Joaquín Guzmán Loera fue líder del Cártel de Sinaloa.
“La idea en ningún momento fue mostrar un circo alrededor de lo que ocurrió con el juicio de El Chapo, sino más bien ir deconstruyendo la industria criminal creada por él; puedes saber sus orígenes y desarrollo mismo, a través de testimonios que se usaron en la Corte, cómo hizo esta alianza con los colombianos, cómo va creciendo en cuanto a la figura del narcotráfico”, resaltó.
También se revela cómo el capo de la droga interactuaba y se relacionaba, la importancia que le daba a su aspecto físico y a lo que se hablara de él. Se relata, por ejemplo, que cuando pudo escapar de la justicia, le pidió a su esposa, Emma Coronel, tinte para el bigote y que viajaba a Suiza para someterse a tratamientos con células madre para mantenerse joven.
“Comienzas a entender y a desmitificar a El Chapo como el asesino que por simplemente dejarlo con la mano estirada después de una reunión, te manda matar; como aquél, que pudo haber asesinado a alguien por la mañana y en la tarde estar comiendo con su familia, como cualquier padre; te da diferentes dimensiones de quién era él como persona; un ser con una desconexión importante de la realidad”, abundó Fernando del Rincón.
El Chapo: dos caras de un capo
- Cuándo: 7 de noviembre
- Canal: CNN en Español
- Horario: 19:00
Aquí puedes ver el trailer del documental.
Juicio histórico contra el narco
Otro elemento importante del proceso de investigación para el documental fue la cobertura del juicio contra El Chapo, que realizó la periodista María Santana, quien llenó 12 libretas con apuntes; información que se usó para esta producción.
“Conozco la historia de El Chapo a través de lo que había construido la prensa, esa leyenda que se conocía; pero estar frente a un Chapo prácticamente derrotado, mi primera impresión fue muy diferente, es una persona que entra a la Corte, bien trajeada, con la cara rasurada, muy amable, saludando a su esposa, enviándole besos”, destacó.
Sin embargo, a lo largo de los testimonios se empieza “a conocer este lado sanguinario y criminal; lo estábamos escuchando de su propia boca, porque tenían cientos de llamadas que el FBI pudo obtener”, resaltó.
Para María Santana, uno de los principales retos de esta cobertura fue basarse en su observación y apuntes que hacía.