El pleno del Senado dio entrada ayer a la propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador, de que se ratifique el Convenio 189 sobre el Trabajo Decente para las Trabajadoras y Trabajadores Domésticos, adoptado en Ginebra el 16 de junio de 2011.
El documento internacional garantiza la promoción y protección de los derechos humanos de los trabajadores domésticos que en México, según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) son cerca de 2.5 millones, 95 por ciento mujeres, y su gran mayoría, no gozan de seguridad social o de la protección de un mecanismo afín.
Alrededor de 85 por ciento del personal que se dedica al trabajo doméstico se ubica en un rango de edad que comprende entre los 25 y los 65 años.
El Convenio 189 de la OIT, adoptado en Ginebra el 16 de junio del 2011, establece que los Estados Parte deben adoptar medidas que garanticen la libertad de asociación sindical, el reconocimiento efectivo del derecho de negociación colectiva, la eliminación de todas las formas de trabajo forzoso u obligatorio, la abolición efectiva del trabajo infantil, así como la supresión de la discriminación en materia de empleo y ocupación a las trabajadoras domésticas.
Prevé, asimismo, que se instrumenten medidas, de conformidad con la legislación nacional y teniendo en cuenta las características específicas del trabajo doméstico, para asegurar que estos trabajadores cuenten con la protección de la seguridad social.
El Convenio fue turnado a las comisiones de Relaciones Exteriores y de Trabajo y Previsión Social.