Gustavo CADENA MATHEY

Muy buen día, apreciado lector:

Se acaba un año más de vida en este mundo y en el balance de las reflexiones, si hubiera algo que en verdad le podamos agradecer por unanimidad al Presidente López Obrador, sería sin duda la excelente y positiva campaña contra las adicciones.

Un aplauso por ello.

Recién nos enteramos que el tabaquismo que provoca espantosas muertes a los fumadores, gracias a la prohibición de hacerlo en edificios públicos ha dejado de ser la primera causa de muerte en el país.

Ahora urge que se haga contra el alcoholismo. Ahí tienen el reto principal para 2020, los gobiernos de la Morena, por todos los intereses que implica.

Siempre ese tipo de campañas públicas contribuyen de alguna manera a influir en el comportamiento de la sociedad en general, no olvidemos aquellas que en su tiempo se realizaron, de “la familia pequeña vive mejor” que provocó matrimonios de solo dos hijos o la de “ciérrale”, que mucho sirvió para ahorrar el agua.

Y lo que a continuación les presento es algo que en esta época también vale bien una recordadita a los lectores. Se trata del texto que este domingo se leyó en los templos católicos:

“Del libro del Eclesiástico (Sirácide) 3, 3-7.14-17
El Señor honra al padre en los hijos y respalda la autoridad de la madre sobre la prole.

El que honra a su padre queda limpio de pecado; y acumula tesoros, el que respeta a su madre.

Quien honra a su padre, encontrará alegría en sus hijos y su oración será escuchada;

el que enaltece a su padre, tendrá larga vida y el que obedece al Señor, es consuelo de su madre.

Hijo, cuida de tu padre en la vejez y en su vida no le causes tristeza; aunque chochee, ten paciencia con él y no lo menosprecies por estar tú en pleno vigor.

El bien hecho al padre no quedará en el olvido y se tomará a cuenta de tus pecados”.

Tenga paz y armonía, cuide el agua y siembre plantas.

gustavocadenamathey@hotmail.com

[Mensaje recortado]  Ver todo el mensaje