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Agencia RTV Noticias

Fue notoria la creciente del río Papaloapan en época de sequía, pero fue el agua que bajó desde las presas que se ubican en la parte alta de la Cuenca que da nombre a esta región la causa.

Y la consecuencia fue que las playas que se ubican a la vera del río Papaloapan prácticamente fueron comidas por el afluente, lo que desestimula la tentación de llegar a nadar, siendo el beneficio para la población el que se elimina una posibilidad de contagio por el virus Covid 19, conocido como Coronavirus.

Claro, el desfogue de aguas pudo ser parte de las pruebas diversas que se realizan en dichas instalaciones, generadoras de energía eléctrica y contenedoras de agua, siempre en atención a la seguridad de la población.

Gracias a dichas presas, el río Papaloapan es un río de crecimiento lento por cuanto a su posible desborde, pues va subiendo lentamente a lo largo de varios días, y no en unas cuantas horas, tal como ocurría antes de la construcción de las instalaciones citadas, en la primera mitad del pasado siglo XX.