El científico Jorge Manzo comentó que, al parecer, estamos esperando que la vacuna o el medicamento que cure la enfermedad venga del extranjero.
Para el científico de la Universidad Veracruzana (UV), Jorge Manzo Denes, varios son los desafíos que se enfrentan con esta contingencia sanitaria causada por la pandemia Covid-19: económicos, sociales, gubernamentales, educativos, incluso de comunicación.
El titular del Centro de Investigaciones Cerebrales (Cice) de la UV, refirió que las pandemias son situaciones por las que la humanidad ha atravesado regularmente en su historia, lo cual se ha estudiado y discutido desde hace mucho tiempo.
No obstante, uno de los aspectos que más llama la atención en este momento es la manera de distribución de este coronavirus: “El hecho de que sea una partícula que viaja en gotas de saliva esparcidas por el aire, y que además sobrevive horas o días sobre diferentes superficies que pueden ser tocadas por otra persona, nos muestra una estrategia efectiva de dispersión”.
La mejor evidencia es que el primer caso se detectó en diciembre de 2019 y a la fecha, apenas tres meses después, se percibe su capacidad de esparcirse por todo el mundo.
De acuerdo con él, “eso es de llamar mucho la atención porque pone en riesgo mortal a un número muy elevado de personas”.
En consecuencia, más allá de la salud hay una serie de retos a enfrentar en esta contingencia, aclaró. Por ejemplo, una de las estrategias asumidas a nivel mundial es el distanciamiento social, que en la práctica es básicamente encerrarse en casa, lo cual no resulta tan sencillo como se escucha.
“Una estrategia de éxito que se presenta de manera homogénea, en una sociedad que es totalmente heterogénea. Esto es, habrá un sector de la población que pueda practicar el aislamiento social sin problema, pero otro sector no podrá hacerlo ya que su economía se basa en el trabajo diario.”
Ahí se percibe un desafío para el gobierno, que consiste en cómo generar programas que permitan a la población adaptar un aislamiento social sin perjuicio en su calidad de vida.
Para Jorge Manzo, lo que tiene gobierno y sociedad tienen que proponerse son estrategias para el beneficio de los diferentes sectores sociales en este periodo de contingencia.
Por si fuera poco, añadió, la comunidad científica tiene un gran reto: crear proyectos que ayuden a enfrentar estas emergencias, pues si bien lo que la sociedad espera es un medicamento o vacuna que ayuden a hacerle frente a la pandemia, es otro el panorama.
“Lo que vemos es que estamos esperando que venga del extranjero, porque no se ve que nuestro país esté haciendo esfuerzos por conjuntar a un grupo de científicos que también se ponga a trabajar en el tema, o al menos no que yo sepa. Éste es uno de los grandes retos en el futuro: qué es lo que la ciencia mexicana va a hacer de ahora en adelante.”
La comunicación y la ciencia
Siendo la comunicación de la ciencia una de sus ocupaciones, Manzo Denes habló de los científicos que han hecho algún esfuerzo en comunicar lo poco o mucho que saben de acuerdo con su especialidad: “La divulgación científica ha sido un rubro ignorado en el contexto de la ciencia nacional, incluyendo las evaluaciones en el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología o el Sistema Nacional de Investigadores, lo que yo veo es que el rubro de la comunicación de la ciencia en nuestro país aún es incipiente”.
Eso explica por qué la divulgación es tomada con muchas reservas por la población, aunado al hecho de que el mismo gobierno es el que abre sus canales oficiales y obliga a basarse en ellos; incluso las propias universidades.
Para muestra, citó a la propia institución, cuyo sitio virtual de plan de contingencia posee diferentes artículos, videos e infografías al respecto, pero se distribuye sólo de manera interna a la comunidad universitaria.
“Yo espero que esto sea una gran lección para darnos cuenta de que la comunicación de la ciencia es una actividad que debe impulsarse de manera decidida.”
Sobre la población que se resiste a aceptar la contingencia, señaló que habrá quienes exageren en los cuidados y los que minimicen el problema, y para todas esas personas es necesario diseñar estrategias de comunicación.
También habló sobre la creencia de que el clima caluroso aminorará el contagio de Covid-19: “Podemos suponer que el calor va a ayudar un poco, pero de eso no estamos seguros. Si vemos las cifras oficiales que se dan en el día a día por el gobierno nacional, los números de casos en nuestro país siguen a la alza, con una curva similar a la que ya tuvieron otros países que ahora están en ambientes más templados.
”Aún no sabemos si el calor va a hacer alguna diferencia, por lo que yo recomiendo seguir las indicaciones de seguridad antes de apostarle al clima.”
Asimismo, dijo que la pandemia del Covid-19 no será la última que se presente y, en ese sentido, recalcó el papel de las universidades “La investigación científica en biomedicina es una tarea que de ahora en adelante debe ser tomada en cuenta muy seriamente y apoyada con recursos de manera decidida”.
Por último, se refirió a la propuesta de crear un instituto de investigaciones en virología y otras especialidades, planteada a la UV cuando se presentó el problema del virus A–H1N1 (2009-2010), proyecto que si bien fue escuchado no ha podido llevarse a cabo.
Karina de la Paz Reyes Díaz.