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Universidad Veracruzana

El avistamiento de especies marinas en las costas veracruzanas, especialmente del delfín nariz de botella (Tursiops truncatus), podría obedecer a la disminución de estrés que generalmente les provoca el ruido y el tráfico de embarcaciones, lo cual impactaría positivamente en términos de reproducción, dio a conocer Eduardo Morteo Ortiz, investigador del Instituto de Investigaciones Biológicas (IIB) de la Universidad Veracruzana (UV), 

Destacó que el decremento gradual o puntual en las actividades humanas durante esta época de confinamiento por el Covid-19, ha permitido a estos animales explorar nuevas zonas que anteno frecuentaban y, donde seguramente, tienen la oportunidad de descansar, alimentarse y no ser molestados. 

Por tanto, la reducción de condiciones de estrés que normalmente tenían en su hábitat y que coincidía con las actividades humanas, favorecería la reproducción de especies cuyo periodo de apareamiento es en esta temporada. 

Asimismo, no descartó la posibilidad de que estos avistamientos continúen y cada vez sean más frecuentes. Sin embargo, una vez que todo vuelva a la normalidad, podría suceder que dejen de explorar los sitios donde anteriormente no permanecían, o bien aumenten su población e invadan otros espacios. 

El especialista en ecología marina y pesquerías explicó que hay varios elementos que influyen en la distribución de las especies marinas, sobre todo de mamíferos como tiburones, delfines y ballenas, entre otros. Una de ellas es el tráfico de embarcaciones, pues varios estudios realizados a nivel mundial han arrojado que el tráfico impredecible y de embarcaciones menores a alta velocidad, definitivamente es un elemento que desmotiva a los mamíferos marinos para ingresar a algunos sitios. 

Otro aspecto es el ruido originado por los motores de las embarcaciones que, cuando se dispersa por todos lados, se vuelve una cuestión difícil de compensar para estos animales. Al respecto, dio a conocer que cuentan con una serie de grabaciones hechas en dos sitios de estudio: las aguas costeras de Alvarado, y en Sontecomapan, en la región de Los Tuxtlas. 

Encontraron que el tráfico de embarcaciones es menor en la región de Sontecomapan en comparación con Alvarado, pues siendo este último un puerto artesanal y pesquero importante, hay mucha entrada y salida de lanchas a alta velocidad. 

También se encontró que hay más delfines en este puerto que en Sontecomapan, lo cual tiene que ver con las condiciones del hábitat, pues suele haber más comida en Alvarado. 

De igual forma, en esta zona se apreció que el nivel del sonido que emplean para comunicarse es mucho más alto y deben subir el volumen de sus vocalizaciones. “Cuando metemos el hidrófono para grabar, los delfines de Alvarado gritan, suben el volumen en comparación con los de Sontecomapan, ellos tienen un volumen más moderado. 

”Aún no tenemos comprobación estadística de este fenómeno, pero todas las grabaciones apuntan a que el ruido está influyendo en la comunicación”, agregó. 

Es decir, el sistema de comunicación, navegación, incluso las técnicas de caza y forma de comer de los delfinesestá adaptada al sonido. 

Morteo Ortiz indicó que de noche los delfines desarrollan un sistema de ecolocalización similar al de los murciélagosemiten un sonido, esperan a que rebote y con eso calculan en dónde están, a qué distancia están las cosas o el alimento, a qué velocidad van, de qué tamaño son los objetos, así como otros datos.

La disminución del estrés provocado por el ruido y tráfico de embarcaciones les permite explorar otros sitios

La disminución del estrés provocado por el ruido y tráfico de embarcaciones les permite explorar otros sitios

Para los delfines es muy importante este sistema de comunicación y de sonido para cazar, orientarse y comunicarse entre ellos.” 

Asimismo, refirió que, para los especialistas de la vida marina, es necesario llevar un registro continuo y detallado de la dinámica poblacional de la especie más común que existe en Veracruz, que es el delfín nariz de botella o toninas. 

Entre 2006 y 2010, en zonas de AlvaradoVeracruz y Boca del Río, se documentó un efecto de disminución en el número de animales presentes y de sus condiciones, sobre todo en el primer puerto. 

Esto fue a través de un proyecto de investigación de una alumna de la Facultad de Biología, quien estudió la condición corporal por medio de fotografías y encontró gran proporción de animales flacos. Otro estudiante de posgrado determinó que cada vez había menos delfines residentes. 

Ambos aspectos los llevaron a pensar que las condiciones del sitio habían empeorado. Por tanto, se empezaron a hacer evaluaciones sobre la captura pesquera, y los estudios del Instituto Nacional de Pesca confirmaron esta tendencia. 

Posteriormente, en 2016 la investigación fue retomada y actualmente se tienen datos continuos de esa población hasta 2020. 

Eduardo Morteo dijo que una vez que se retomen las actividades laborales, esperan analizar la información más reciente y ver si se recuperó la población o si la tendencia continúa a la baja, sobre todo después de la contingencia. 

“Será interesante estudiar si hubo algún efecto de esta cuarentena para las poblaciones de animales que estamos estudiando. 

Destacó que todos estos estudios y análisis los han desarrollado a través del Laboratorio de Mamíferos Marinos del IIB, en colaboración con el Instituto de Ciencias Marinas y Pesquerías de la UV. 

Particularmente, los de Alvarado, datan de 2002-2003, 2006-2010 y 2016-2020. Mientras que los de Sontecomapan iniciaron en 2018, con el apoyo del biólogo Christian Vargas, de la organización Regenerando Nuestro Entorno, A.C. 

También, se ha contado con el financiamiento del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y del Acuario de Veracruz. 

Sobresale la colaboración de otras instituciones, entre ellas: la Universidad Nacional Autónoma de México, del Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada y de la Universidad Autónoma de Campeche.

Decremento de actividades humanas por la pandemia podría impactar positivamente en términos reproductivos

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