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Reuters

El muestreo genético de los Rollos del Mar Muerto desafía la idea de que los escritos de 2 mil años de antigüedad fueron obra de una pequeña secta judía, y arroja luz sobre la redacción de las Escrituras en la época del nacimiento del cristianismo.

La investigación, que descubrió parte de la procedencia de los pergaminos al identificar las pieles de animales utilizadas, también puede ayudar a proteger las preciadas reliquias bíblicas contra falsificaciones.

Los Rollos del Mar Muerto, una colección de cientos de manuscritos y miles de fragmentos de antiguos textos religiosos judíos, fueron descubiertos en 1947 por beduinos locales en los riscos del desierto de Qumran, a unos 20 km de Jerusalén.

Muchos estudiosos creían que los rollos se originaron con los esenios, que se habían separado de la corriente principal judía. Pero algunos académicos argumentan que el tesoro tenía muchos autores y puede haber sido sacado de Jerusalén para su custodia.

La secuenciación de ADN realizada por la Universidad de Tel Aviv y la Autoridad de Antigüedades de Israel ha permitido una mejor diferenciación entre los pergaminos.

Si bien la piel de oveja de algunos de los rollos se podía producir en el desierto, la de vaca, que se encuentra en al menos dos muestras, era más típica de ciudades como Jerusalén, donde los judíos, en ese momento, tenían su segundo templo y estaban bajo el dominio romano.

“El material mismo, el material biológico del que están hechos los rollos, es tan revelador e informativo como el contenido del texto”, dijo a Reuters Noam Mizrahi, profesor de estudios bíblicos en la Universidad de Tel Aviv.

Los investigadores determinaron que dos copias textualmente diferentes del Libro de Jeremías fueron traídas a Qumran desde el exterior. Tales hallazgos, señalan, indican que la redacción de los textos judíos estaba sujeta a variación e interpretación, contrario a los puntos de vista posteriores de la escritura sagrada como únicos.

La lección, dijo Mizrahi, es que “la sociedad judía del Segundo Templo era mucho más plural y multifacética de lo que muchos de nosotros tendemos a pensar”.

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