La crisis económica de 2020, acrecentada por los cierres de sectores económicos producto de la pandemia del nuevo coronavirus, hundirá la economía mundial hasta la peor recesión observada desde la Segunda Guerra Mundial y el ingreso per cápita será menor en todas las regiones del planeta, aseguró el Banco Mundial en su último reporte económico.
De acuerdo con los analistas de la institución financiera internacional, la COVID-19 dejó un impacto súbito y generalizado por las medidas de distanciamiento social.
A nivel global la caída estimada es del 5.2 por ciento en 2020, “la peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial, y la primera vez desde 1870 en que tantas economías experimentarían una disminución del producto per cápita”. Para Latinoamérica y el Caribe, el impacto de la pandemia será de una caída del 7.2 por ciento anual.
“A raíz de las graves distorsiones a la oferta y la demanda internas, el comercio y las finanzas, se prevé que la actividad económica de las economías avanzadas se contraerá un 7 por ciento en 2020. Se espera que los mercados emergentes y las economías en desarrollo (MEED) se contraigan un 2.5 por ciento este año, su primera contracción como grupo en al menos 60 años. La disminución prevista en los ingresos per cápita, de un 3.6 por ciento, empujará a millones de personas a la pobreza extrema este año”, destacó el análisis del banco Mundial dado a conocer este lunes.
Los impactos más fuertes se observan en las naciones que la epidemia afectó más fuerte. En este caso, América Latina es , a estas alturas, la región capital del nuevo coronavirus con la mayor cantidad de contagios generalizado. “Si bien la magnitud de las perturbaciones variará en función de la región, todos los MEED acusan vulnerabilidades que se ven agravadas por las crisis externas”, destacó el banco.
Además la suspensión de las clases y las dificultades de acceso a los servicios de atención de salud, previó, dejarán impactos a largo plazo sobre el desarrollo del capital humano.
“Las perspectivas dan mucho que pensar, ya que es probable que la crisis deje cicatrices difíciles de borrar y que plantee complejos desafíos mundiales”, señaló Ceyla Pazarbasioglu, vicepresidenta de Crecimiento Equitativo, Finanzas e Instituciones del Grupo Banco Mundial.
La intensidad de las repercusiones negativas a nivel mundial serán menos fuertes hacia la segunda mitad del año y las perturbaciones en los mercados financieros no se prolongarán en el tiempo. Los repuntes esperados por el Banco Mundial son del 4.2 por ciento global en 2021: un 3.9 en las economías avanzadas y un 4.6 % para las economías en desarrollo.
El peor escenario. Si la pandemia se alarga, hay agitaciones financieras o un repliegue del comercio mundial en las cadenas de suministro, la economía mundial se contraería hasta un 8 por ciento este año y en 2021 apenas podría recuperarse un 1 por ciento. Para las naciones emergentes la caída sería del orden del 5 por ciento.
En el caso de la economía de Estados Unidos, se contraerá un 6.1 por ciento; la zona del euro, un 9.1; Japón, un 6.1 por ciento.
“La recesión ocasionada por la COVID-19 es singular en varios aspectos, y es probable que sea la más profunda para las economías avanzadas desde la Segunda Guerra Mundial y la primera contracción del producto en las economías emergentes y en desarrollo en al menos los últimos seis decenios”, dijo Ayhan Kose, director del Grupo de Perspectivas del Banco Mundial.
Kose destacó que no hay registros de correcciones a la baja tan súbitas como las actuales en los pronósticos de la economía internacional. “Si el pasado sirve como referencia, los pronósticos podrían empeorar aún más, lo que implica que los encargados de formular políticas deben prepararse para la posibilidad de tener que adoptar medidas adicionales para apoyar la actividad”, alertó el experto.
El Banco Mundial destacó que las proyecciones de crecimiento a corto plazo están sujetas a un grado inusual de incertidumbre, por lo que se examinan hipótesis alternativas. Además, alertó sobre la probabilidad de que las consecuencias sanitarias y económicas de la pandemia sean más profundas en los países donde la informalidad está generalizada.
Aseguró que la pandemia está causando estragos en los planos económico y humano en los países más pobres
“Las perturbaciones a las cadenas de valor mundiales pueden agudizar los efectos de la pandemia sobre el comercio, la producción y los mercados financieros”, observó el Banco Mundial. Además alertó que las recesiones profundas tienen efectos perjudiciales y de largo plazo sobre la inversión, van en detrimento del capital humano debido al desempleo que ocasionan y provocan un repliegue del comercio internacional y las relaciones de suministro.
Sobre la caída de los petroprecios puntualizó que es poco probable que modere los efectos de la pandemia, pero podrían ser positivos durante la recuperación.
Por regiones, para Asia oriental y el Pacífico previó un crecimiento de 0.5 por ciento en 2020, el índice más bajo desde 1967; para Europa y Asia central, una contracción de 4.7 por ciento; para América Latina y el Caribe, un -7.2; en Oriente Medio y Norte de África, un 4.2 menos; en Asia meridional un -2.7; para África al sur del Sahara, -2.8 por ciento.
Foto: EFE, EPA, Erik. S. Lesser, Archivo.