En Coruña, en 1936, Bebel García, en el estadio se pone la camiseta del Depor. A la salida del estadio se pone la camiseta de la Juventud Socialista. Once días después del cuartelazo de Franco, cuando acaba de cumplir 22 años, enfrenta el pelotón de fusilamiento. -Un momento.manda. Y los soldados, gallegos como él, futboleros como él, obedecen. Entonces Bebel se desabrocha la bragueta, lentamente, botón a botón, y de cara al pelotón echa una larga meada. Después, se abrocha la bragueta: -Ahora sí, dice». Lo escribe Eduardo Galeano en «Espejos». Foto de «es.sport».