Analistas señalan que los menores ingresos por Impuesto al Valor Agregado se asocian a un menor consumo y a la pérdida del empleo; para el 2021 se mantendrá la apuesta por una mayor fiscalización.
Durante julio, los ingresos que obtiene el gobierno federal por el cobro del Impuesto al Valor Agregado (IVA) registraron una caída anual de 19.5%, en términos reales, con lo que dejaron al erario 77,636.7 millones de pesos.
Se trató de la contracción más grande que se haya registrado desde la crisis financiera del 2009, cuando los ingresos por este gravamen al consumo cayeron 19.9%, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
“Si bien, en julio hubo una reapertura parcial de la economía, lo que se observa es que eso no repercutió en un mayor gasto de la población mexicana”, expuso José Luis de la Cruz, director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico.
Mencionó que los menores ingreso por IVA también se asocian a la pérdida del empleo, ya que en julio no se presentó una recuperación y las personas que encontraron empleo fue con un menor ingreso al que percibían antes, “entonces, el IVA refleja tanto la caída del mercado interno como el bajo consumo de las familias mexicanas”.
Si se considera el acumulado enero-julio, los ingresos por el IVA fueron por 567,435.1 millones de pesos, una caída anual de 3.7%, en términos reales.
Ingresos totales caída a doble dígito
Los ingresos totales del gobierno en julio sumaron 395,152.9 millones de pesos, esto es una caída de 10.7% anual en términos reales. Si se considera el acumulado enero-julio, los ingresos fueron por 2.99 billones de pesos, esto es una caída anual de 4.7 por ciento.
En la recaudación tributaria, el gobierno ingresó un total de 255,377.8 millones de pesos, lo que significó una caída anual de 6.7 por ciento. En el acumulado sumaron un total de 2 billones 4,163.3 millones de pesos, lo que representó una caída anual de 0.8%, de acuerdo con Hacienda.
Dentro de estos ingresos, lo que se obtuvo por el cobro del Impuesto Sobre la Renta (ISR), sumó 129,674.8 millones de pesos en julio, un crecimiento anual de 0.8 por ciento. En el acumulado, dichos ingresos alcanzaron 1.09 billones de pesos, un crecimiento anual de 1.2%, según datos de Hacienda.
Los ingresos petroleros en el séptimo mes del año fueron por 52,364.9 millones de pesos, una caída de 27.3% anual. Si se considera el acumulado enero-julio la cifra es de 302,159.6 millones de pesos, una reducción anual de 39.2 por ciento.
“Es claro que lo que más impactó es la caída en el precio del barril del petróleo, estaba presupuestado en 49 dólares por barril y se cayó a un promedio de 35 dólares. Las caídas entre marzo y abril fueron terribles lo que afectó los ingresos petroleros y también la baja producción”, dijo Raymundo Tenorio, economista del Tecnológico de Monterrey.
Paquete Económico será inercial
Con el panorama que presentan los ingresos presupuestario, De la Cruz prevé que el Paquete Económico del 2021 sea inercial y que, tenga una proyección de ingresos sin crecimiento y casi iguales a lo que se aprobó en la Ley de Ingresos del 2020.
A su parecer, el gobierno mantendrá su apuesta por una mayor fiscalización para seguir obteniendo ingresos de la recaudación del ISR a grandes contribuyentes.
“El buen trabajo de fiscalización generó una válvula de escape pero se va a agotar conforme se acabe el año”.
Tenorio comentó que el panorama que se tiene de las finanzas públicas a julio “nos da cuenta de que el escenario hacia 2021 será muy parecido al del 2020 con un bajo incremento en los ingresos tributarios, pero en los petroleros no veo dónde puedan crecer.
“No se ve cómo se pueda incrementar la producción, se prometía 1.8 millones de barriles diarios promedio, veo el escenario muy pesimista. El panorama para 2021 será muy parecido a lo que vimos en julio de este año”, concluyó.
elizabeth.albarran@nulleleconomista.mx
