Lugar:
Fuente:
Universidad Veracruzana
  • Por medio de la literatura, Marleys Patricia Meléndez Moré consolidó este logro. 
  • Es egresada de la Especialización en Promoción de la Lectura y estudiante de la Maestría en Estudios de la Cultura y la Comunicación . 
  • Compartió el premio con la comunidad de San Francisco de Mata Clara, municipio de Cuitláhuac, donde realizó el trabajo,

Marleys Patricia Meléndez Moré, ganadora del Premio “Arte, Ciencia, Luz”.

 

 

Claudia Peralta Vázquez,, 

En la edición del presente año del Premio “Arte Ciencia y Luz” que otorga la Universidad Veracruzana (UV), una de las ganadoras al mejor trabajo recepcional fue Marleys Patricia Meléndez Moré, egresada de la Especialización en Promoción de la Lectura y realizadora del proyecto “Literatura infantil con representaciones afro: promoción lectora y construcción identitaria”. 

Su objetivo fue contribuir a la construcción identitaria de los niños y a la adquisición de hábitos de lectura desde la escuela y el hogar, a través de estrategias de promoción a la lectura que fortalecieran sus prácticas lectoras y mostraran representaciones de personajes afrodescendientes en la literatura infantil. 

Para Marleys, saberse acreedora de este premio significa una gratificación muy grande, pero no deja de compartirlo con la población afrodescendiente de la comunidad San Francisco de Mata Clara, municipio de Cuitláhuac, donde desarrolló este trabajo a través de diversos talleres. 

“Fue algo muy provechoso, ver que tuvo eco y que nos ganamos el premio hace pensar que vale la pena seguir trabajando por estas comunidades.” 

Marleys Patricia Meléndez reconoció a la UV por premiar a los estudiantes que han demostrado en sus trabajos una innovación en cuestiones académicas, pero también un aporte a ciertas ramas o líneas de investigación. 

 

Con su trabajo, contribuyó a la construcción identitaria de los niños y a la adquisición de hábitos de lectura

 

Cuando lo hice no pensé que sería premiado, pero sí hubo un empeño y una entrega total en hacer un buen trabajo para beneficiar a la comunidad afro”, expresó. 

La mejor recompensa dla joven galardonada y originaria de Colombia fueron los resultados, pues al reconocerse como afrodescendientes al interior de cada historia, los participantes de los talleres hacían interpretaciones en relación con su entorno, lo que incrementó su interés en la lectura y contribuyó al reconocimiento identitario. 

Al implementar dicha iniciativa en esa localidad, en 2018, la idea de Marleys era llamar la atención, sobre todo para que empezaran a crearse libros y cuentos para niños donde se incluyeran las representaciones de los afrodescendienteslo cual es tan necesario y urgente, dijo. 

Por ello, al enterarse de los resultados del Premio “Arte Ciencia, Luz”, que se dieron a conocer en noviembre pasado, de inmediato pensó en el eco que esto tendría, y así fue pues un escritor colombiano de literatura infantil la contactó para conocer más acerca del tema. 

“Es emocionante pensar cómo los proyectos pueden trascender y beneficiar a la comunidad afro, más que quedarse como una estantería académica. 

De hecho, el proyecto dio pie al tema de la Maestría en Estudios de la Cultura y la Comunicación (MECC), que actualmente cursa eel Centro de Estudios de la Cultura y la Comunicación (CECC) de la UV, donde aborda qué tipo de apropiaciones y representaciones adquirieron los niños en medio de esos contextos. 

“Siempre he tenido ese compromiso con la comunidad porque creo que son sujetos de investigación que tienen que verse beneficiados. Les conté del premio y todos están muy contentos, seguimos con esto de potenciar el trabajo de la comunidad mediante la lectura.” 

 

Los talleres que impartió beneficiaron a niños de la comunidad San Francisco de Mata Clara, municipio de Cuitláhuac

 

En total, la investigadora impartió 21 talleres en los que participaron alrededor de 20 niños de entre ocho y 12 años de edad, padres de familia y ocho docentes de la Escuela Primaria El Manantial. 

Por las tardes, los talleres los extendía a otros pequeños de la localidad, y el resultado fue que muchos de ellos quedaron siendo lectores. 

En el caso de los padres, la mayoría sabía la historia de la comunidad afro y cómo abordar el tema con sus hijos, mientras que los docentes terminaron por adoptar estrategias de cómo acercar a los pequeños a la literatura. 

Señaló que en Mata Clara aún se mantienen las características fenotípicas afro; es decir, se ven niños oscuros con ciertos rasgos físicos. Casi todos son familia y predominan los apellidos: Peña, Blanco, Virgen, Flores, entre todos se mezclaron, todos son familia y por eso han mantenido el fenotipo, a pesar de que hoy en día hay más mestizaje. 

Marleys se congratula al recordar diversas anécdotas, como la de un señor que obtuvo el gusto por la lectura gracias a que su hijo participaba en los talleres, incluso pensaba que el niño perdía el tiempo al acudir a las clases. A partir de los talleres de lectura se da cuenta de esto y empieza a leer con su hijo. 

 

Los padres de familia también participaron