Pese a la disminución de contagios de Covid-19, Quintana Roo mantendrá la suspensión de actividades gubernamentales no esenciales.
A partir del lunes 22 el estado regresa al color amarillo del semáforo epidemiológico estatal, lo que permitirá mayor reapertura de negocios con base en los lineamientos del Plan Reactivemos Quintana Roo, informó el gobernador Carlos Joaquín González.
Sin embargo, alertó que en el sur, en la capital del estado, deberá ponerse mayor atención en la aplicación de los protocolos, las medidas y los hábitos de higiene, pues aun cuando se tuvo un descenso de 28% en la curva de contagios en los últimos días, se tienen signos de alerta.
Por primera vez, desde que se tuvo el repunte de contagios a raíz de las fiestas de Navidad y de año nuevo, se tuvo una disminución en la curva de contagios en los 11 municipios del estado, añadió.
Pidió a los quintanarroenses tener en cuenta “cómo una semana de fiestas puede afectar hasta por dos meses la salud de la gente y la economía de un estado”
“Dense cuenta de la importancia que tiene el respeto de los protocolos, la aplicación de los hábitos, las medidas de prevención. No hay que bajar los brazos. Démonos cuenta lo que ocasiona una semana de fiesta (…) No podemos tener un semáforo que vayamos de naranja a amarillo, de amarillo a naranja, pues eso representa afectaciones a la economía de las empresas y los negocios”, expuso.
Por ello, solicitó a todos, micro, pequeños, medianos y grandes empresarios a respetar los protocolos para el cuidado de la salud tanto de trabajadores, clientes, familias y lograr el equilibrio entre la salud y la economía.
Con el semáforo amarillo se permitirá la reactivación de lavanderías, pesca, comercio de alimentos al por menor, construcción, actividades legislativas y agricultura. La venta de muebles y computadoras estará permitida en tiendas con 80% del aforo, mientras que los servicios contables, administrativos, profesionales y técnicos tendrán capacidad máxima de 75% y los gimnasios y clubes deportivos en espacios abiertos se permiten a 70 por ciento.
Mientras que en espacios cerrados los establecimientos como hoteles, restaurantes, parques temáticos, campos de golf, servicios turísticos, playas y parques públicos, servicios religiosos, teatros y cines, centros comerciales, tiendas departamentales y salones de belleza podrán operar solamente a 60% de su capacidad.
Aunque se avanza a semáforo amarillo, se mantiene la suspensión de actividades gubernamentales no esenciales.
Se trata de una ampliación de la medida, ya que a mediados del mes pasado decretó una primera suspensión de labores del 16 de enero al 15 de febrero.
Se mantienen activas las actividades relativas a la recaudación, auditorías, atención de trámites, de Salud, Protección Civil, Seguridad Pública, así como Juntas de Conciliación.
kg
Foto de Inmobiliare.
