Por la mañana, la cuenta oficial del recinto compartió en Twitter el proceso a través del cual se pintó el agua de la fuente que se encuentra en la fachada, una tradición que inició el ex presidente Barak Obama en 2012 y que desde entonces se repite año con año.

Cuando cayó el sol, los muros exteriores del edificio se iluminaron de verde, por lo que la White House lució así durante varias horas.

Washington DC no fue la única ciudad donde se conmemoró la tradición católica. En la capital de Irlanda, Dublín, lugar de donde la celebración es originaria, se realizó el emblemático desfile que se organiza cada marzo, esta vez sin público, como parte de las medidas de distanciamiento social por la pandemia de covid-19.

En México, diversos monumentos también se iluminaron de verde esta noche, tanto para festejar como para desear buena fortuna a aquellos que lo vean, un guiño alusivo al popular trébol irlandés, símbolo de la buena suerte.