Cientos de migrantes provenientes de Haití, El Salvador, Honduras y África, se arremolinan en los alrededores de las instalaciones de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), luego de ingresar al país sin control alguno.

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En el municipio fronterizo de Tapachula, donde se encuentra la Comar, es cada vez más común observar a migrantes extracontinentales, quienes han cruzado sin ninguna restricción Centroamérica y Sudamérica y logrando llegar hasta la ciudad.

Al menos 300 extranjeros buscan una cita para empezar sus trámites en el Instituto Nacional de Migración (INM), en tanto, deambulan por las calles del municipio, a las afueras de las oficinas de este inmueble a la espera de su turno.

En el área de migración sur, también se han visto un alza de migrantes extracontinentales que se han sumado a los indocumentados de El Salvador, Honduras, Guatemala y Cuba.

Otros migrantes de Honduras que han sido detenidos y deportados, lograron regresar burlando a las autoridades y empezarán su trámite ante la Comar para continuar su viaje rumbo a Estados Unidos.