«No tomar torito es como no venir a Boca del Río», esta frase la recita Lorenzo Montalvo a cada persona que visita su local, Toritos La Chata es la primera cantina que nació justo en el corazón de Boca del Río hace 83 años y que hoy sobrevive y se adapta a los cambios
La historia de Toritos La Chata se remonta desde hace tres generaciones, con el tío abuelo de Lorenzo, quien inició con la venta de bebidas alcohólicas en el año 1925.
«Era de mi tío abuelo, luego lo tiene mi mamá, que está era la cantina del pueblo y tienda de raya. Vendían arroz, frijol, cremas, licores y la verdad pues esa tradición se ha hecho con los años. Está cantinita que fue la primera en Boca del Río y todavía existe», dijo orgulloso.
Posteriormente su madre, Rosa María, fue la siguiente en tomar el liderazgo de este negocio, que años más tarde su hijo lo convertiría en referencia obligada para visitar en Boca del Río.
Durante los primeros 20 años, Toritos La Chata tuvo muchos altibajos y cambios, esto debido a que la economía del municipio boqueño se encontraba sufriendo una caída, que afectó a los comercios de la zona.
Para afrontar esta crisis y mantener a su familia, la mamá de Lorenzo introdujo un nuevo producto, el tradicional Torito, una bebida a base de alcohol de caña de azúcar.
Fueron los campesinos cortadores de caña quienes crearon el Torito, esto como un estimulante para aguantar las largas jornadas, mezclaban el aguardiente que producían con frutas de la temporada.
A pesar de que el tradicional torito se realizaba de dos sabores, Rosa comenzó a experimentar y comercializarlo con diferentes frutas, actualmente cuentan con ocho.
«Todos estudiamos, dentro de mi familia y mis hermanos somos universitarios gracias a este negocio», mencionó Lorenzo.
Dentro del lugar se alcanzan a ver distintas fotografías que adornan las paredes y que tienen su propia historia, como la vez que el revolucionario cubano Fidel Castro estuvo en Boca del Río, también escritores, artistas, Youtubers y distintos personajes que han degustado esta bebida originalmente veracruzana.
EN PANDEMIA, CRECIÓ POPULARIDAD DE TORITOS LA CHATA
Debido a los años y la tradición que tiene entre los boqueños y veracruzanos, este negocio ha logrado resistir múltiples crisis y cambios que demanda el mercado, reinventándose y adoptando nuevas estrategias para permanecer en el mercado.
Pero al igual que muchos locales en Veracruz, también tuvo una afectación debido a la pandemia de la Covid-19, la cual afrontan mediante las redes sociales.
«Esto era un panteón con luces, un muerto completamente, no había movimiento, no había nadie en la calle, nosotros tuvimos que incursionar muy fuerte en redes sociales, mi hija hizo un programa de ventas por Face y por redes y fue como nos manteníamos, si había que ir hasta la zona norte a vender pues allá íbamos a hacer entregas», aseveró.
Durante la emergencia sanitaria cerraron cerca de 25 comercios que se encontraban en los alrededores de la cabecera municipal de Boca del Río, lamenta Lorenzo Montalvo.
La promoción en Youtube fue otro de los impulsos que los hizo llegar a otros estados, gracias a la visita de «El Coreano de Corea», un reconocido Youtuber que realizó un vídeo referente al negocio y el cual lo dio a conocer a más personas del país.
«En plena pandemia se dio este fenómeno y pues no dejamos de vender (…), la gente nos hablaba por teléfono para poder entrar al negocio, no podíamos abrir porque estábamos cerrados completamente, la gente quería venir, se hace tan popular (el vídeo) que las mismas redes sociales hacen que el negocio también sea más conocido», dijo.
Gracias a estas estrategias no tuvieron que despedir a ningún empleado, así como modificaron horarios y las medidas de higiene.
BOQUEÑOS DE ORIGEN
Otro de los proyectos que se mantienen en pie y que pretenden preservar la identidad del municipio es el programa Boqueños de Origen, el cual a través de Facebook tiene como finalidad mostrar a las personas más representativas del lugar y promover la zona turística.
«Promovemos los valores de tradición, valores que se están perdiendo por la misma familia, hacemos altares de muertos», contó.
