- Para los cinco escultores reunidos en esta exposición, “la piedra se moldea en sus manos en busca de la forma y la idea”-
Karina de la Paz Reyes Díaz..
Corazón de piedra, exposición colectiva de los escultores Adalberto Bonilla, Hiroyuki Okumura, Uros Uscebrka, Farfán Acosta y Ryuichi Yahagi, continúa abierta al público en el Centro Recreativo Xalapeño hasta el 20 de este mes.
Ryuichi Yahagi, uno de los organizadores y artista e investigador adscrito al Instituto de Artes Plásticas (IAP) de la Universidad Veracruzana (UV), comentó que se trata de aproximadamente 30 obras que se exhiben desde el 20 de mayo.
En el texto de sala, autoría de la escritora y directora de la Facultad de Letras Españolas de la UV, Magali Velasco Vargas, se lee: “El dicho tiene un origen bíblico y en el Antiguo Testamento el ‘corazón de piedra’ simboliza el espíritu rebelde e indiferente que deberá cambiar a un ‘corazón de carne’, sensible y abierto a la palabra. Para los cinco escultores reunidos en esta exposición, la piedra no tiene corazón, se crea y moldea en sus manos en busca de la forma y la idea”.
Sobre los expositores, Velasco Vargas refiere que Adalberto Bonilla (Puebla, 1949), colaborador desde 1978 en el IAP, trabajó de 1963 a 1968 con el escultor japonés Kiyoshi Takahashi (Nigata, 1925-1996), “quien, atraído por los ecos de la cultura prehispánica y la violencia de la naturaleza, decidió radicar y trabajar en tierras veracruzanas”.
Añade: “Takahashi fue un parteaguas en la tradición escultórica en Xalapa. El puente de imaginarios compartidos iniciado por él, permitió el cruce de otro personaje cardinal para la arte: Hiroyuki Okumura (Kanazawa, 1963). Okumura, desde 1989, echó raíces en la misma tierra de donde nace la materia de sus esculturas”.
De Ryuichi (Kawasaki, 1967), señala: “Continuó los pasos de compatriotas en esta diáspora artística en busca de los ecos del pasado en diálogo con el presente, la identidad y la creación de comunidades en torno a motivos como la paz”.
Asimismo de Uscebrka (Belgrado, 1971), académico de la Facultad de Artes Plásticas de la UV, dice: “Ha trabajado la escultura aplicada en la imagen urbana y su trayectoria artística es un puente más entre Serbia y México, como los esculpidos por los maestros japoneses”.
Éste, comenta la escritora, fue maestro de Acosta (Orizaba, 1991), “el más joven de los cinco expositores, amplificando su obra escultórica con el cruce de disciplinas y artes aplicadas”.
En la inauguración, el pasado 20 de mayo, estuvieron presentes autoridades universitarias, entre ellas el director del IAP de la UV, Héctor Vinicio Reyes Contreras.