El municipio de Metepec, en licitación de la Dirección de Turismo y Cultura local y el apoyo de empresarios, promueve la primera Ruta Cultural de la localidad con el objetivo de impulsar el turismo, después de varios meses de paralización derivada de la emergencia sanitaria del Covid-19.

“Pretendemos atraer a los viajeros-paseantes a los sitios tradicionales de la cultura del municipio, los cuales han sido relegados y hasta sumidos en el olvido durante algunos años”, destaca en un comunicado Aglagel Hernández Isla, uno de los promotores de la iniciativa.

Ruta Cultural anunciada para el próximo 9 de octubre con arranque en los municipios aledaños de Pachuca y Tulancingo hasta las distintas zonas turísticas y culturales asentadas en Metepec, pueblo ubicado en el Valle de Toluca. Limita al oriente con San Mateo Atenco y Santiago Tianguistenco; al poniente y al norte con Toluca; al sur con Mexicaltzingo y Calimaya.

Localidad declarada Pueblo Mágico en 2012, cuenta con más de 300 artesanos y 270 familias consagradas a la alfarería, principal actividad del municipio: faena para trabajar el barro hasta convertirlo en selectas piezas, las cuales testifican el mestizaje cultural de la región: origen de los cotizados Árboles de la Vida, artesanía representativa de gran belleza cargada de significado religioso perfilada desde los tiempos prehispánicos. Arte popular muy apreciado y reconocido en todo el mundo, que ha llegado hasta el Vaticano con la presencia de un Árbol de la Vida gigantesco —bendecido por el Papa— en tributo a la Patrona de México, la Virgen de Guadalupe, confeccionado totalmente por artesanos de Metepec.

Asimismo destaca la arquitectura donde se entrecruzan edificaciones modernas (Centro Panamericano de Ecología, Edificio del Sistema de Radio y Televisión Mexiquense…) con recintos coloniales (Convento e Iglesia Franciscana del siglo XVI con su célebre frontispicio barroco levantado por artistas indígenas; Templo El Calvario de estilo neoclásico registrado en el siglo XVIII…).

Los visitantes se ponen en contacto con una atmósfera de romántico recogimiento en el diálogo con alfareros, creadores de vitrales y trabajadores de las talabarterías. La Tlanchana, personaje fantástico de la imaginería aborigen, que según la leyenda aparecía entre la corriente de los manantiales, puede sorprender a los viajeros en medio de la noche.

Seductores atardeceres para caminar entre los puestos callejeros que ofertan platillos de sabores inolvidables elaborados por guisanderos, dueños de recetas prehispánicas: atoles, tamales (charal, chorizo verde), acocil, pata de res, chicharrón, mixiote de conejo, sopas (hongo, médula), mole rojo, entre otros platillos. Los postres tradicionales se convierten en exquisiteces que nadie puede desdeñar por sus aromas frutales: dulces de calabaza, pepita, alfeñique, jale, borreguitos, limones con ralladura de coco y pan de pulque.

Imposible dejar de lado a las bebidas típicas: las Garañonas, a base de hierbas medicinales y frutas (según los lugareños posee propiedades afrodisiacas); el pulque, licor de naranja (Mosquitos de Toluca), el nanche y chiloctli.

Ruta Cultural conformada por la visita a la Estación del Ferrocarril de Tulancingo en enlace con la Estación del Ferrocarril de Tortugas, recorrido con parada en la Fundición de Ferrería de Apulco, con la opción de acudir a la Fábrica de Aguardiente para catar ese licor tradicional y concluir en el Centro Holístico Casa del Alma Krisbal donde se pueden saborear algunos alimentos típicos de la zona y, asimismo, ser testigos de una pasarela de los trajes tradicionales del carnaval de Metepec, el cual tiene su origen desde hace más de un siglo.