Alumnos normalistas reforestan el Cerro Macuiltépetl en 1930. Aquelllos pequeños cipreses y cuasuarinas reconocieron su tierra y crecieron como verdaderos gigantes. 91 años después son testigos mudos de la evolución de un parque. Foto del Patronato Ecologico Macuiltépetl. Lo publican en «Xalapa Antiguo, análisis y opínión»-