La gripe (gripa) común, así como no queriendo, se cobra la vida de entre medio millón y un millón de personas al año, según la Organización Mundial de la Salud. Tan solo en EE UU, en donde llevan registros estadísticos muy detallados en materia de salud, alrededor de 40 mil personas mueren al año. Aquí habría que decir que estos registros incluyen decesos causados por neumonía. La gripa es un padecimiento muy común que suele mutar cada vez que puede, es una enfermedad muy caprichosa. La llamada gripe española, entre 1918 y 1919 dejó alrededor de 50 millones de muertos en todo el mundo. Algunas crónicas han calificado a la gripe española como «el mayor holocausto médico de la historia», el 40% de la población del mundo se vio afectada. Y de ahí, a través de diferentes épocas otros virus han atacado a los seres humanos como son los casos de la gripe aviar (también llamada asiática), que surgió a partir de un virus que afectó a los patos silvestres; la gripa de Hong Kong, a finales de los 60 del siglo pasado, que dejó una media de 1 millón de muertos pero que pudo ser controlada gracias a una vacuna que se desarrolló rápidamente, bueno y de ahí la gripe porcina a mediados de los 70 y nuevamente la aviar de 1997 y 2003, y la porcina de 2009, que en México la vivimos en carne propia porque el gobierno se organizó de tal manera que sus afectaciones no pasaron de unos cuantos casos. ¿Qué hay que hacer, qué medidas tomar? Pues las de siempre, no hay que olvidar que la gripa se transmite por fluidos. A la hora de estornudar procurar cubrirse la boca con la parte interna de la unión del brazo y antebrazo, lavarse las manos con frecuencia, incluso con gel de alcohol y estar muy pendiente de cualquier síntoma sospechoso, pero sobre todo proteger a los menores de edad, bebés, vamos, y a las personas de la tercera edad vacunarlas contra la influenza. Lo escribe Marco Aurelio González Gama, directivo de este Portal. Foto de Unidad Médica Angloamericana.