«La mayor protección que una nación puede lograr ante la nueva realidad mundial radica en lo obvio: en la fortaleza de su propio desarrollo, solamente posible en el contexto de un gobierno con claridad de rumbo y una sociedad sin mayores crispaciones. La ausencia de esta condición anticipa un futuro complicado». Lo escribe el siempre lúcido Luis Rubio en «Reforma».