«Benjamín Garcimarrero dejó pendiente el más caro de sus anhelos: ser pianista de burdel. Yo espero que donde esté ahora… en el cielo, seguro, haya un buen lupanar con un piano de cola en el centro de un salón donde Benjamín rubrique las noches con «la fuma en la boca». Lo escribió, bromista como siempre, Magno Garcimarrero con motivo del octavo aniversario luctuoso de su gemelo. Lo publican en «Xalapa Antiguo, análisis y opinión» que dirige Jorge Díaz.