En cualquier organización, la satisfacción y motivación del empleado es muy importante a la hora de aportar valor. En este sentido, uno de los pilares fundamentales de la concepción del trabajador como pieza clave, y no como un individuo que simplemente desarrolla una tarea y al que se le paga ´por ello. Además, la satisfacción del trabajador ya no tiene que ver únicamente  con tener un buen salario, sino que está relacionada con otros factores  como la flexibilidad o la posibilidad de conciliación real entre la vida personal y la profesional. Existe la necesidad de motivarle, atraerle y contribuir a su adptación a la empresa. Es parte de lo que escribe Begoña Gómez en»The Conversation» y lo publica El Economista. Foto de «Shutterstock.