En la sección «Carrusel» de hace dos semanas, publicamos una poesía que escribió el gran médico veracruzano Iván Hernández Gutiérrez, reconocido en Harvard. Alguna vez le oímos decir que a un paciente, sobre todo si estaba enfermo de algo más delicado que una simple gripe, había que, además de recetarle los mejores medicamentos para el caso, hacerlo amigo de uno, meterse en su vida e inyectarle ánimos para que también emocionalmente pudiera superar su enfermedad. Médico excelente y además muy sensible, además de buen poeta, ha sido nuestro querido amigo Iván, quien fue director del CEM, en esta capital. Foto de «Los Políticos».