«A mi no me chinga cualquiera por que yo no uso su lenguaje, yo uso el lenguaje de Dios», decía. Y a continuación sacaba una Biblia de bolsillo y nos recetaba los siguientes proverbios del Rey Salomón: 1) «De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas.. Y la buena fama, más que la plata y el oro». 2) «Di a la sabiduría tu eres mi hermana, y a la inteligencia llámala tu pariente». 3) «El que guarda su boca y su lengua, su alma guarda de angustias». 4) «Instruye al niño en su camino, y cuando sea viejo no se apartará de él». Nos los platicó hace como 10 años. Foto de «Plumas Libres».