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E-Consulta Veracruz

La medida comenzó a implementarse desde ayer lunes, especialmente en la zona cañera que implica a unos ocho municipios

Por tiempo indefinido, supervisiones escolares de la región de las Altas Montañas decidieron autorizar la suspensión de las actividades al aire libre en las escuelas, luego de que el termómetro ha registrado una temperatura máxima de 40 grados Celsius.

La medida comenzó a implementarse desde ayer lunes, especialmente de la zona cañera que implica a unos ocho municipios donde es normal el aumento de calor, pero que, en este moment , como son: Cuichapa, Amatlán, Cuitláhuac, Yanga, Atoyac, Omealca, Tezonapa, y Paso del Macho.

“Se ha tomado esta decisión porque el calor está bastante fuerte y, en muchas escuelas no se cuenta con domo en las canchas; algunos niños en nivel primaria han sufrido desmayos y hasta sangrado en la nariz y no queremos que pase a mayores, por el tema del golpe de calor”, expresó una catedrática.

La nueva disposición como medida preventiva, fue notificada a la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) quien respaldó a los directivos escolares, por lo que, los maestros y maestras, especialmente aquellos que imparten la materia de educación física, deben buscar otras alternativas para dar sus clases, sin que se exponga a los estudiantes a los rayos del sol.

“Estamos sugiriendo a los padres de familia que, sus hijos e hijas lleven gorra que podrán usar fuera del salón, cuando tengan que salir por alguna razón, así como una botella de agua de más de un litro, si es posible para que, se mantengan hidratados”, expresaron.

De acuerdo, a la Secretaría de Protección Civil del Estado, el pronóstico se mantendrá con temperaturas que rebasan los 35 grados Celsius, por lo que, es posible que la medida se haga extensiva a todos los municipios de la zona centro, donde se resiente la ola de calor.

En varios planteles escolares, los padres de familia ahora aportan un garrafón cada semana, para que los estudiantes puedan rellenar sus botellas que llevan de casa, pues con la sensación térmica y “bochorno”, incrementó el consumo del líquido.