Todo está listo para que este martes la minuta se dictamine a primera hora en Comisiones del Senado y se suba al pleno en el curso del día, hasta que la minuta sea aprobada, incluso de madrugada, según las previsiones de la bancada de Morena.
Mientras eso ocurra, integrantes del Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial fueron convocados a movilizarse en las afueras del Senado, sólo para dar seguimiento al debate.
De manera paralela, dirigentes sindicales acudirán a un foro en la Cámara de Diputados y, a un costado, en el inmueble sede del Poder Judicial Federal, en San Lázaro, habrá manifestaciones en el sexto día de paro de labores, en protesta por la intención de extinguir los fideicomisos judicial
Ambas acciones serán pacíficas. Mientras tanto, el proceso va, sin interrupciones, pues, advirtieron trabajadores del Poder Judicial, la mayoría de Morena y sus aliados ya decidieron legislar sin escuchar.
Este lunes y durante dos horas una comisión de trabajadores, desde oficiales hasta magistrados del Poder Judicial, fueron atendidos por el senador de Morena Alejandro Rojas Díaz Durán.
Al encuentro acudieron Patricia Aguayo Bernal, empleada judicial; el magistrado Marco Polo Rosas Vaqueiro, titular integrante del séptimo tribunal colegiado en materia civil del primer circuito, Liliana Contreras, magistrada federal, Juan Carlos García Campos, secretario de Tribunal Colegiado, y Oscar Alonso Yáñez Pallares, entre otros.
Más tarde también se reunieron con las senadoras de Acción Nacional (PAN) Xóchitl Gálvez, responsable del Frente Amplio por México (FAM), Kenia López y Alejandra Reynoso, a quienes expresaron su preocupación por las afectaciones laborales y al sistema de justicia.
“Sabemos que Morena está con oídos sordos, nos escuchó uno de ellos, no sabemos como van a votar los demás”, reconoció al salir del encuentro Aguayo, quien aseguró que Rojas dijo estar convencido de que los 13 fideicomisos del Poder Judicial no pueden desaparecer, pues no son privilegios y la medida afectará los derechos laborales de los empleados de ese poder.
La misma trabajadora admitió que con un solo voto no habrá diferencia: “Esto quedará en las manos del grupo parlamentario que tiene la mayoría y estamos preparando las siguientes acciones que desembocarían en el terreno legal, pero no podemos adelantar nada”, agregó.
“No venimos en plan de confrontación. Es un error que el Poder Ejecutivo, el Legislativo y Judicial se peleen cuando los tres servimos a un patrón que es el pueblo y es el que resultará afectado en cuanto la justicia le falle”, expuso el magistrado Rosas.
La magistrada Contreras advirtió que habrá daño a la operación del sistema de justicia con la eliminación de los fideicomisos, pues estos también atienden a las mejoras a las que México se comprometió a nivel internacional: deben aplicarse recursos, pues en México se dedica solo el 2% del PIB y hay naciones que destinan hasta el 8%, destacó.
La ausencia de recursos, destacó Juan Carlos García, repercutirá en un sistema de justicia más lento y se podría poner en riesgo, incluso, agregó, la paz social, pues si hoy un juicio de amparo lleva hasta un año, sin recursos el tiempo puede duplicarse o hasta triplicarse.
“Y lo verdaderamente riesgoso es que el mandato de la Constitución que dice que nadie se hará justicia por propia mano estará en peligro. Porque ante la desesperación de los quejosos (…) ante la noticia de que ya no va a ser seis meses, un año, sino el doble o el triple de tiempo para resolver su amparo, imagínense el impacto en la paz social en el país”, destacó.
La negativa de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) a la ministra Norma Piña para reunirse con el Senado como representante del Poder Judicial, consideró Oscar Alonso Yáñez Pallares, muestra que, “aunque la justicia es ciega, hoy la quieren amordazar”.
