Sensibilidad en el PJE

Gustavo Cadena Mathey

Premio Nacional de Periodismo

Buen día apreciado lector:

Mientras llegan las definiciones en torno al asunto electoral, de vital importancia para todos, le recuerdo que, a principios de este año, el 17 de enero, entre otras cosas, difundí en este espacio que después de todo el desbarajuste en el Poder Judicial del Estado, que generó en mala hora Edel Álvarez Peña, con la llegada de la tercera presidenta en fila, Lizbeth Aurelia Jiménez Aguirre, renacía la esperanza de una Verdadera justicia para los veracruzanos:

«Y dicen que ella sí sabe cómo hacer bien las cosas, que es decente y sí sabe que la ley, ¡es la ley!».

Ahí comenté que enterada por su secretario particular David Cardeña Ortega de una queja contra la institución en la que ya asumía la posible solución a la problemática interna de su nueva responsabilidad, la queja se hizo pública en un noticiero de orden nacional.

Consciente del tema, la nueva presidenta le entró con destreza al toro; llamó a los involucrados y al momento mostró la disposición y voluntad adecuadas para encontrar soluciones, lo cual le generó simpatías.

El quejoso quería ser escuchado por las nuevas autoridades del Tribunal Superior de Justicia, en Xalapa y criticar la lentitud con la que en el pasado se tomó el caso.

No se trataba de buscar reflectores sino de atender un reclamo público. La señora hizo lo correcto.

Además de esa grata impresión, escribí de un renacer la esperanza de que ahora sí, en adelante tendríamos un Poder Judicial que verdaderamente impartiera justicia como lo quería Ulpiano.

Por lo pronto, a ello se aúna, en el caso de la demanda laboral desde 2017 de este reportero, contra el Consejo de la Judicatura de ese tribunal, que es justo destacar, el asunto va en camino de solución gracias a la buena disposición y conocimiento de la ley, de la magistrada Presidenta, Liz.

Por lo pronto, en estos días vienen tiempos de informes sobre el arduo trabajo desempeñado este año, tanto de doña Liz, como de la magistrada Itzel Castro Castillo, la presidenta del Tribunal de Conciliación y Arbitraje, conocido como el TECA.

Doña Itzel, ha mostrado a los veracruzanos su enorme capacidad y entrega en tiempos complicados, con impresionante disciplina.

Por supuesto que su actuación no solo llamó la atención de colegas federales sino de sus propias compañeras magistradas Graciela Patricia Berlín Mendoza y Claudia Ocampo García, integrantes de un sólido equipo que con gran sensibilidad, verdaderamente se preocupa por hacer realidad la tan anhelada justicia que reclaman los veracruzanos.

Tenga paz y armonía en su hogar. Cuide el agua y las plantas, el clima se está transformando en Xalapa. ¿Ya se dio cuenta?

gustavocadenamathey@nullgmail.com