El partido ultraderechista Agrupación Nacional toma ventaja en la primera vuelta de las legislativas que se celebran este domingo en Francia.
Marine Le Pen
Por:
STEPHANIE REYES
El partido ultraderechista Agrupación Nacional (RN, por sus siglas en francés) toma ventaja en las legislativas al llevarse la primera vuelta, evidencia del impulso que tiene esta tendencia frente al gobierno de Emmanuel Macron.
Sondeos reportan que la fuerza política de Marine Le Pen lidera el proceso con hasta 33 por ciento del voto; sin embargo, aún no hay nada definido, pues todo se decidirá hasta el próximo 7 de julio, cuando se celebrará la segunda vuelta, en las que se verá una disputa reñida con la coalición de izquierdas, que alcanzó el segundo lugar al registrar 28 por ciento de la preferencia, por arriba de la alianza de Macron con 20 por ciento, de acuerdo con medios locales.
Tras el resultado parcial, Le Pen celebró el respaldo al garantizar su reelección en la Asamblea Legislativa y destacar el salto que sigue dando la extrema derecha en la nación. En sus primeras declaraciones destacó que las elecciones reflejan que el pueblo “desea pasar página después de siete años de poder despectivo”, en franca crítica al actual presidente.
Y destacó que si este triunfo se ratifica el próximo domingo es posible que Jordan Bardella, su mano derecha y actual líder de RN, se convierta en el nuevo primer ministro, con lo que se consagrarán como verdadero contrapeso ante el presidente.
Sin embargo, con la jornada de hoy sólo estarían decididos unos 80 escaños, lo que representa que falta por conocer casi 500 que irán prácticamente cara a cara, y no queda claro si garantizarán la mayoría absoluta para ello.
En contraste, el presidente Emmanuel Macron convocó a una gran unidad, en un intento de replicar las advertencias sobre el riesgo de la la ultraderecha tome las riendas del país, pues sería la primera vez que esto ocurre desde la Segunda Guerra Mundial, según declaraciones del socialista Olivier Fauré.
Llamado al que se sumó el exmandatario Francois Hollande, quien se sumó a la lista del Nuevo Frente Popular, al referir que se requiere todo el apoyo para frenar a la extrema derecha.
Francia, en riesgo de cohabitación
La victoria de la ultraderecha en el país ratifica la posibilidad de una posible cohabitación.
Esta condición es cuando el presidente es de un partido y el número dos del país, el primer ministro, es de otro; es decir, que el líder no alcanzó la alianza necesario para colocar a un afín en esa posición.
Cabe destacar, de acuerdo con agencias y medios locales, que dicho gobierno ya ha ocurrido al menos tres ocasiones en Francia. El primer fue en 1986-1988, bajo la gestión de socialista Francois Mitterrand, acto que se repitió siete años después también bajo un gobierno de Mitterrand.
Mientras que el más reciente ocurrió hace casi tres décadas, en 1997, con Jacques Chirac, quien pasó de una cohabitación como primer ministro a una desde el Palacio del Elíseo, sede de la presidencia.
KT
