En «Carrusel» publicamos hace unas semanas unas frases sobre la adulación y recordamos a un maestro de ella, el finado Prof. Carlos Hank González. Escribe José Martínez en su libro. Las enseñanzas del Profesor» de Editorial Océano. «Carlos Hank, cuyo estilo de de hacer política fue la cooptación y la adulación, se echó muy fácil a la bolsa a Salinas de Gortari, durante la campaña presidencial de éste. Lo deslumbró con su poder, con su dinero, con su carisma. El 13 de marzo de 1988, Hank envió a uno de sus choferes y a una caravana de guardaespaldas a la casa de campaña de Salinas, ya que le ofrecía una cena en su residencia de Las Lomas de Chapultepec. El encuentro contó con las asistencia de los hombres más ricos y poderosos de México y sus esposas, los barones del dinero. Maestro en el arte de la adulación, Hank halagó y colmó de elogios a su invitado. Salinas quedó muy satisfecho de esa reunión y nombró a Hank Secretario de Turismo y posteriormente de Agricultura y Recursos Hidráulicos». Y hubiera sido el Presidente de la República pero el problema constitucional fue que su padre era de origen alemán. Foto de «Ruido en la Red».