Los campos del Rancho del Padre en Medellín se pintan de violeta y amarillo en estas fechas.
Carlos Navarrete
En la localidad de Rancho del Padre, municipio de Medellín de Bravo, una decena de campesinos de dedican a la producción de flor de Día de Muertos -terciopelo y cempasúchil- y Salvador Carvajal, “Don Chava” -como lo conocen en el pueblo- es uno de ellos. En esta época del año, su campo de cultivo se pinta de púrpura.
A un costado de la carretera Medellín-Jamapa sobresale un labrantío de aproximadamente media hectárea de flor de terciopelo, también conocida como “flor moco de pavo”, con sus características tonalidades púrpura, verde y violeta.
El dueño del terreno es “Don Chava”, un campesino de 80 años que desde hace dos décadas produce la flor, la siembra en julio y la cosecha en octubre.
En su predio se siembra única y exclusivamente la “celosia argéntea”, mejor conocida en México país como flor de terciopelo o cresta de gallo. Se trata de un producto representativo de la celebración de Día de los Muertos, ya que es utilizada por su llamativo color para decorar las ofrendas.
“Tengo cerca de 20 años, como 18 o 20, más o menos, aquí siembro maíz, frijol y la flor. Esta la empiezo a sembrar el 25 de julio, el plantel y ya cuando crece lo traigo para acá. Esta se siembra en la tarde porque el sol la quema y se cae, si es muy delicada”.
Se cree que la de terciopelo es una flor originaria de África y de Asia, sin embargo en la actualidad puede ser encontrada en lugares donde haya las condiciones necesarias de tierra y clima, como en el municipio de Medellín de Bravo.
Este producto es uno de los elementos necesarios para la elaboración de las ofrendas para los muertos.
Los otros campesinos de Rancho del Padre trabajan el cempasúchil, una flor que gracias a su colores anaranjado rojizo o amarillo y su característico aroma, es uno de los elementos más representativos de las ofrendas para los seres queridos que partieron al “más allá”.
La tradición marca que con los pétalos de las flores de cempasúchil se deben elaborar senderos que simbolizan el camino que deben seguir los difuntos para encontrar los altares en su honor.
El nombre del cempasúchil proviene del náhuatl “cempohualxochitl” que significa “veinte flores” o “varias flores”.
Pero “Don Chava” es experto en la siembra de la también conocida como flor “moco de pavo”, se especializó en la producción de la planta de terciopelo y en el pueblo es uno de los campesinos más buscados por la calidad de su producto.
A mediados de octubre, cuando arranca la cosecha, comienza la venta para el campesino. Comerciantes de varios municipios circunvecinos llegan a Rancho del Padre n busca del producto de “Don Chava” para revenderlo previo al Día de Muertos.
“La cosecha ya comenzó, según como vengan a pedirme de flor se las vendo. Me vienen a comprar de varios lugares, hasta de Puebla han venido”.