«Después de las 19 horas de este jueves, una lluvia pertinaz azotó a Córdoba. A la 22.45 horas, nubes negras presagiaban una tremenda tormenta, las calles estaban desoladas.. Milagrosamente a las cero horas, la luna majestuosa emergió entre la bruma, una luz inexplicable le abrió paso y a las 0.30 horas lucía hermosa iluminándolo todo; su eterno enamorado Marte le acompañaba a su derecha siempre fiel y luminoso. Mis 27 gatos salieron de su escondite a admirarla, acompañándome extasiados.. Si la Providencia Divina hace cambiar la peor de las tormentas en minutos, esperamos que también en muy poco tiempo, nuestra patria se transforme en un ambiente de paz, armonía y unidad, como nos gusta vivir a los mexicanos». Nos lo envió nuestro querido amigo y Presidente de la Coparmex en la Ciudad de los Treinta Caballeros, Sabás Flores Mora.