Cuando a Francisco King Hernández lo nombraron, llegó al IPE pero estaba tomado por los trabajadores. A las personas que estaban afuera del edificio les dio las llaves y les dijo: «no tienen que estar afuera, pueden pasar, el instituto es de ustedes, veremos su situación». Y se ganó la confianza de los trabajadores. Se la platicó su yerno, Alvaro Ruiz, a un amigo, a raíz de la Cápsula del mediodía. Foto de Archivo Histórico de Coatzacoalcos..